El crimen de Samuel Luiz en los aledaños de la Playa de Riazor, en A Coruña, conmocionaba el 3 de julio de 2021 a toda España y provocaba una oleada de manifestaciones por todo el país pidiendo justicia para el joven, asesinado tras varias agresiones en la ciudad gallega después de recibir, presuntamente, insultos homófobos. Ahora, llega el momento del juicio oral, que comienza este martes, 15 de octubre, con la designación de las personas que formarán el jurado popular para deliberar el destino judicial de los cinco acusados, que en el momento de los hechos eran amigos y ahora están enfrentados por las diferentes formas que han tenido de afrontar sus confesiones.
Hace tres años y tres meses del homicidio y, aunque en ese momento se detuvo a siete personas, dos de ellas eran menores de edad y cumplen una pena de tres años y medio de internamiento tras llegar a un acuerdo de conformidad. Hasta este jueves no habrá declaraciones y serán dos de los imputados los que ofrezcan su versión de los hechos, además de los padres de la víctima y las personas que intentaron salvarle aquella noche, en unas sesiones que tratarán de esclarecer todas las cuestiones, -se habla de un total de 87-, que la presidenta de la Audiencia Provincial pone sobre la mesa.
El crimen de Samuel Luiz que conmocionó a España
Samuel Luiz tenía 24 años y aunque su país natal era Brasil, llegó con solo un año a Galicia junto a sus padres, donde residía y trabajaba como enfermero, mientras seguía sumando en su formación para obtener el título de protésico dental, tal y como repasa 'La Voz de Galicia'. Aquella fatídica noche del viernes, 2 de julio de 2021, salió de fiesta junto a su amiga Lina, después de meses de medidas de seguridad por la pandemia del coronavirus y aprovechando que los locales de ocio nocturno volvían a abrir sus puertas, todavía con restricciones para evitar oleadas de contagios. Ya en la madrugada, sobre las 3 menos cuarto de la mañana, salieron del pub y, según el relato, hicieron una videollamada a otra amiga, clave en el inicio del ataque, ya que por ahí llegó una de las amenazas y frases que podrían probar el delito de odio al que apunta el juez que ha llevado la instrucción del caso para dos de los acusados.
Diego M.M. y Catherine S.B. (Kathy), se habrían dirigido a la víctima con la siguiente tentativa: "Deja de grabar, a ver si te voy a matar, maricón". Aunque él les trató de explicar que lo que hacía era hablar con una persona a través de una llamada con imagen, comenzaron los primeros golpes, que el magistrado encargado de la fase preliminar del proceso atribuye al primero de los acusados mencionados, tal y como informa 'ElDiario.es', mientras en el caso del segundo, la "voluntad de participar en el ataque", además de considerar que "eran conscientes de que sus actos podían causar el fatal desenlace" y que habrían hecho lo posible porque Samuel no contara con ayuda, llegando a empujar a su amiga Lina.
En la reconstrucción de los momentos claves de este brutal crimen que hace el mencionado diario gallego, hay tres escenarios. El primero, tras las presuntas amenazas, cuando comienza también la agresión física a la que se sumaría otro de los acusados, Alejandro (Yumba) y cuando Ibrahima y Magatte, las dos personas que tratan de salvar al joven, consiguen alejarle por el paseo marítimo, pero vuelven a alcanzarle y hay una tercera, la definitiva, cuando "Samuel se desploma en la carretera e Ibrahima lo lleva hasta la acera, donde cae inconsciente". Con todo el relato de los hechos, son muchas las asociaciones LGTBIQ+ y las personas que han alzado su voz y denunciado el asesinato como un crimen homófobo y piden que se juzgue como tal.
Un jurado popular deliberará si hubo ensañamiento y discriminación en el juicio por el asesinato de Samuel Luiz
El juicio oral por el asesinato de Samuel Luiz comienza este martes, 15 de octubre, pero la primera jornada únicamente está programada la elección, tras ver a 36 candidatos, de los nueve ciudadanos y los dos suplentes que formarán el jurado popular, para el miércoles iniciar los trámites burocráticos y que el jueves, 17, empiecen a declarar los acusados y testigos. Los dos primeros serán Alejandro M.R y Catherine S.B. desde el lado del banquillo, pero ese día también hablarán los padres de la víctima y los dos ciudadanos que trataron de ayudarle la madrugada del 3 de julio de 2021, así como otros testigos que pudieron observar algo la noche del crimen. Sobre la mesa hay 87 cuestiones y otras 7 relativas a la ejecución del homicidio y las penas a las que se enfrentan los imputados van entre los 22 y 27 años, siendo esta última mayor para Kaio A. por el presunto robo del teléfono móvil de Samuel.
Al frente de la Fiscalía, Olga Serrano y, con ella, la duda de si se trata o no de un delito de odio, si hubo ensañamiento y discriminación y si lo que pide la acusación popular llega a quedar reflejado en la potencial condena, para la que todavía habrá que esperar, ya que el juicio terminará el 18 de noviembre tras escuchar a más de 80 testigos y valorar todas las pruebas periciales y testificales antes de que el jurado emita su deliberación. Cabe destacar, además, el hecho de que se les acuse de asesinato y no de homicidio, ya que se añade la consideración de que "los continuos y brutales golpes propinados a Samuel fueron realizados con la intención deliberada de aumentar innecesariamente su dolor y sufrimiento físico para alcanzar el fin letal, reflejo de una crueldad y deshumanización extremas", destacaba la fiscala. Ana García, desde la organización sin fines de lucro 'ALAS A Coruña', espera, -en declaraciones recogidas por 'Cadena Ser'-, que quede probada para los acusados "su animadversión hacia la orientación sexual homosexual que le atribuyeron a la víctima. Sería un paso importante para el colectivo".