Las fuertes rachas de viento registradas durante la madrugada del domingo en varios puntos de España han obligado a algunas zonas a tomar medidas urgentes para evitar una tragedia. La mayor de ellas se ha producido en el Zuera Sound Festival de Zaragoza con la evacuación de casi 5.000 personas. El viento, que llegó a alcanzar 40 kilómetros por hora, tambaleó la infraestructura del escenario poniendo en peligro a los asistentes.
Momentos de tensión en el festival Zuera Sound
Las fuertes rachas de viento han obligado en Zaragoza a desalojar a casi 5.000 personas del Zuera Sound Festival como medida preventiva, tal y como ha informado Europa Press. Según fuentes del Gobierno de Aragón, no se ha producido ninguna incidencia, aunque el viento registrado allí ha superado los 40 kilómetros por hora. Un vídeo de Tik Tok publicado por una de las asistentes muestra cómo el fuerte vendaval tambalea la infraestructura del escenario y aviva la preocupación entre los festivaleros. Según varios asistentes en redes sociales, "el ambiente era tenso". En el vídeo se puede apreciar también a un miembro de la organización del festival comunicando el momento de la evacuación de los asistentes. "Buenas noches a todo el mundo. Por favor, no hay nada de lo que preocuparse. Vamos a hacer caso de las indicaciones del personal de seguridad, protección civil y Guardia Civil", señalaba.
Tal y como ha adelantado 'Levante', el desalojo ha durado más de una hora y los presentes se han marchado en autobuses y coches particulares. Aun así, las ganas de subir a los autobuses ha provocado avalanchas de personas entre los asistentes. La organización del festival se ha hecho eco del incidente alrededor de las 04:00 horas de la mañana de este domingo en su cuenta oficial de Instagram. "Debido a las inclemencias meteorológicas acontecidas en las últimas horas y teniendo en cuenta la seguridad de todos nuestros asistentes como prioridad, el show de música en directo no se reanudará", señala el comunicado del Zuera Sound Festival. Según varios testigos del festival, el público ha accedido a abandonar el recinto y ha colaborado con los agentes sin oposiciones.
Como bien anunció el miembro de la organización, en la evacuación han intervenido efectivos de la Guardia Civil de Zaragoza, Policía Local de Zuera y la agrupación de voluntarios de Protección Civil del Bajo Gállego. Este tipo de medidas cautelares se activan en situaciones que pueden poner en riesgo la seguridad de los asistentes. De hecho, se actúa con rapidez para evitar incidentes como el que ocurrió hace solo dos años en Cullera (Valencia). Un inminente vendaval que echó abajo la infraestructura de uno de los escenarios se cobró la vida de un joven y dejó a varios hospitalizados.
Los afectados hablan
El incidente ha dejado a muchos de los asistentes insatisfechos en el último día de festival. Muchas de las quejas que han trascendido destacan por la falta de autobuses para trasportar a miles de personas que fueron evacuadas tras el inesperado vendaval. Algunos de los asistentes que salieron de inmediato tras la evacuación de la Guardia Civil esperaron hasta tres horas para acceder a un autobús que ya habían pagado previamente. Al parecer, esta situación provocada por el vendaval no es nueva. Uno de los asistentes al festival ha explicado en 'Hoy Aragón' que no es la primera vez que ocurre. "El año pasado hubo un bus cada 3 o 4 horas para más de 5.000 personas… básicamente estuvimos más de 3 horas esperando, este año ha pasado igual", ha señalado.
El joven que ha podido hablar con el medio aragonés ha dado a conocer el caos que vivió de primera mano a la salida del festival. El asistente ha destacado las avalanchas de personas empujando que se produjeron para subir a los autobuses. De hecho, los vehículos estaban tan colapsados que incluso no se podían ni mover dentro de ellos, según cuenta el joven. Otro de los elementos que ha provocado una sensación de insatisfacción a los asistentes ha sido la falta de personal para gestionar la entrada de los evacuados en los autobuses. "No había personal controlando eso", ha señalado en 'Hoy Aragón'. La situación era tan caótica que, incluso, algunos asistentes optaron por volver a Zaragoza en taxi aun habiendo costeado el servicio del autobús.
"Hubo personas que se tuvieron que volver en taxi a pesar de haber pagado 30 euros solo de bus de un día", señala uno de los jóvenes asistentes a 'Hoy Aragón'. Otro de los asistentes ha expuesto en redes la angustia vivida. "Si hubiera pasado algo en algún coche en el acceso de entrada imagínate la que se lía. No puede ser haya que ir por un camino de tierra en el que sólo cabía un coche, podía haber ocurrido una catástrofe. No entiendo cómo se ha permitido hacer un festival en esas condiciones. Por no hablar del transporte, con un bus cada 50 minutos, todo el mundo iba en coche, claramente", señala.