Sin lugar a dudas, había una gran expectación por nuestra aventura en la plataforma Netflix y en los capítulos de Miami. Como os he dicho en anteriores blogs, me imagino que a los amantes de ‘Sálvame’ les habrá seducido y a los detractores les habrá fascinado, también, para poder criticarnos. La crítica no es buena cuando se insulta, pero sí lo es cuando se hace sanamente, instruye y construye. Si hay alguien que esperaba ansiosamente ver estos capítulos es Jorge Javier Vázquez, porque así lo habíamos hablado anteriormente.
Los retratos de jorge
Él está fuera de España, descansando. Hace unos días, recibí una llamada por WhatssApp de él en la que en su tono jocoso me dijo: “No me atrevo a leer las primeras líneas que he puesto sobre ti en mi blog”. Tampoco me costó mucho convencerlo para que me las leyera, porque él estaba loco por hacerlo. Antes de hacerlo me dijo: “No sé, me da un poco de miedito”. Le dije: “Uy, cuando te excusas tanto es peligroso”. Solo me lee la primera línea en la que habla de Lisboa. Él sabe que amo esa ciudad y su decadencia. Eso me despierta la curiosidad y el deseo de que llegara el pasado miércoles para leer sus palabras en esta revista. Ahí descubrí que ha hecho un retrato majestuoso de cada uno de los componentes de ‘Sálvese quien pueda’. Eso es el producto de no solo haber trabajado tantos años juntos, sino de haber tenido interés por saber cómo somos cada uno, en qué flaqueamos y ante qué nos hacemos fuertes. Me ha llegado el rumor de que a algún compañero no le han gustado mucho sus palabras. Me llama la atención, porque si Jorge tiene algo es habernos dicho a la cara lo que piensa de nosotros y lo que significamos para él personal y profesionalmente. Por eso califico de majestuoso su blog de la semana pasada. La gente cree conocernos, y es verdad que conocen gran parte de nosotros. Pero solo el que trabaja con nosotros detrás y delante de las cámaras es consciente de lo que somos para lo bueno y no tan bueno.
Belén es la mejor
Cuando leí lo que Jorge decía de María Patiño lo entendí perfectamente. Ella se crece frente a una cámara y cuando pisa un plató de televisión. María ha tenido la generosidad de mostrar su vulnerabilidad, sus sentimientos, sus miedos y su sensibilidad, que casi siempre está a flor de piel. Tengo que confesaros que vi los tres capítulos el día que se estrenaron con mi amigo Kike Calleja. No me fui a la cama muy contenta. Tuve una mala noche. No busco excusas, pero estaba aún convaleciente del covid, que como ya os conté la semana pasada me ha pasado factura física y emocionalmente. Al día siguiente, tenía el bautizo del nieto de mi hermana, y decidí por la tarde reunir a mis amigos como tenía previsto haberlo hecho, antes de dar positivo en covid, para verlo de nuevo. Os reconozco que mi visión fue diferente. No le di tanta importancia a cosas a las que se las había dado el día anterior. Me sentí más reconfortada e incluso lo disfruté en muchos momentos. Si a mí me preguntan quién es el mejor de esta aventura, no tengo ninguna duda. La respuesta es Belén Esteban. Hemos vuelto a ver a esa Belén en todo su esplendor y con esa espontaneidad que la caracteriza. Me refiero a que no tiene filtros y dice lo que piensa, en algunas ocasiones, sin procesar antes de soltarlo. Otra de las grandes personas que creo que aportan algo diferente a lo que han hecho a lo largo de su carrera profesional es María Patiño.
La verdad sobre Lydia
Y qué decir de ese momento de Lydia Lozano metiéndose en la piscina. Esa imagen formará parte de las antologías y de las hemerotecas del mundo entero. Es uno de los momentos que más disfruté de esta aventura en Netflix. Creo que hay cosas que solo las sabe hacer ella, porque las convierte en épicas. Lydia ha sido una de las sufridoras como también lo he sido yo en otros momentos del reality. Aunque ella se ampare en que nunca la escucho, sabe que no es verdad. No solo le presto atención, sino que siempre que he presentado un programa le he dado su sitio. Siempre que iban a chincharla yo he estado ahí para decirle que no entrara al trapo. No quiero decir más, porque no quiero desvelaros lo que va a pasar en México. Creo que los próximos capítulos van a ser muy diferentes a Miami. Si creíais que nos habíais visto en todo nuestro esplendor creo que lo vais a flipar con lo que viene. No sé si porque tengo el recuerdo más cercano, me he sentido más a gusto en México a pesar de los encontronazos que ocurrieron allí. Una recomendación: no vale con verlo solo una vez. Lo bueno de ‘Sálvese quien pueda’ es verlo varias veces porque descubres cosas que te habías perdido. Hablo de una imagen, un gesto, una música o un detalle. Así que a por muchas visualizaciones, amigos.