Si el objetivo de tu rutina de belleza es conseguir un visible efecto antiedad, sabrás que lo mejor que puedes hacer para ello es añadir un producto con retinol. Es el ingrediente de moda, el activo del que todo el mundo habla y el que triunfa por los grandes beneficios respecto al envejecimiento de la piel que tiene. Pero su fama no solo reside en estos cambios visibles que notan aquellas que lo han probado, sino también en los falsos mitos que han giran en torno a él. De hecho, se trata de un activo que "da miedo" y que muchas no quieren usar por efectos tales como la descamación en la piel, manchas o una sensibilización por el sol. Pero, ¿es cierto todo esto?

Pues para resolver las dudas, hemos hablado con Raquel González, cosmetóloga y creadora de Byoode, y nos ha contado la realidad de estos rumores que han hecho que el retinol sea un ingrediente que no convence del todo. Es hora de desmontar los falsos mitos y la experta lo ha conseguido.

Cuáles son los falsos mitos sobre el retinol

El retinol no afina la piel, la fortalece

“Es súper común escuchar eso de que el retinol exfolia o afina la piel, pero no es cierto. Lo que hace es trabajar desde las capas más profundas, ayudando a que las células nuevas y sanas suban a la superficie y, al hacerlo, se facilita que se eliminen las células muertas. Además, estimula el colágeno y la elastina, así que con el tiempo tu piel se vuelve más gruesa y fuerte. ¿Afinar la piel? ¡Para nada, la fortalece!”.

Puedes usar el retinol por el día, pero no tiene mucho sentido

“Esto siempre genera dudas, pero te cuento: el retinol no irrita por el sol, lo que pasa es que es fotosensible, o sea, que pierde su efecto con la luz solar. Por eso es mejor usarlo de noche, donde puede trabajar sin interrupciones. La idea de usarlo por la noche es por sacar el máximo provecho al partido, porque la luz del día podría degradarlo y hacer que el producto pierda toda la eficacia. Ahora bien, mucha gente se cree que por lo que no se puede usar es porque es fotosensibilizante, que sensibiliza la piel, y esto no es así o, de serlo, aplica solo a las fases iniciales de uso, durante el primer mes aproximadamente”.

El retinol y la vitamina C sí se pueden usar juntos

“Hay mucha gente que dice que no se pueden combinar porque el pH de la vitamina C puede interferir en el retinol y hacer un efecto exfoliante, pero eso ya quedó en el pasado y los retinoides y la vitamina C son el ‘combo ganador’. Las fórmulas actuales están diseñadas para funcionar juntas. De hecho, cuando usas vitamina C y retinol en la misma rutina, se potencian mutuamente. Es ideal para tratar manchas y mejorar la luminosidad. Así que sí úsalos sin miedo”.

El retinol no exfolia, renueva la piel

“Este es un mito súper común. El retinol no exfolia, lo que hace es renovar la piel desde dentro, ayudando a que las células nuevas se vayan viendo en la superficie. Sí, la piel se ve más suave y lisa, pero no porque retire células muertas directamente, como un exfoliante. Por eso, puedes (y debes) combinarlo con exfoliantes para maximizar los resultados”.

Las pieles sensibles pueden usar retinol

“Las pieles sensibles le pueden sacar mucho partido al retinol, aunque hay ese mito de que si tienes piel sensible no debes hacerlo, pero es totalmente falso. Las fórmulas actuales están pensadas para que se libere el activo poco a poco y así evitar irritaciones. La clave está en empezar con dosis bajitas, espaciando los días de aplicación y dejando que tu piel se adapte. Con paciencia, hasta las pieles sensibles pueden tolerar concentraciones altas”.

El retinol no irrita ni pela la piel

“Esto solo ocurre con fórmulas puras, sin encapsular, en fórmulas poco equilibradas… Lo normal actualmente es que se trabajen fórmulas complejas que estabilizan el retinoide, lo encapsulan y lo combinan con ingredientes que apoyan sus efectos. También es importante la concentración por la que empezamos. Si trabajamos con fórmulas seguras y empezamos con concentraciones bajitas, no debería pelarnos ni irritarnos”.

No todos los retinoides son retinol

“Este es uno de los más habituales. Parece que que todos los retinoides son retinol, pero no. Todos los retinoides son derivados de la vitamina A y solo uno de ellos es el famoso retinol que, a su vez, tiene diferentes versiones cosméticas con mayor o menor eficacia, desde el retinol puro (máxima) a los palmitatos (inferior), por ejemplo. Pero es que además ahora hay retinoides de última generación como el retinal o el retinyl retinoato, activos más potentes que el retinol y con menos efectos secundarios. Por eso hay que hacer mucha labor de educación para que la gente lo comprenda y aplique el que más le puede beneficiar”.