Lo mires por donde lo mires coincidirás conmigo en que es un corte de pelo con mucha fuerza, y aunque no es para todo el mundo, el mullet es más tendencia que nunca. Este estilo unisex lleva varias temporadas reinando en las peluquerías y salones de belleza. No nos extraña, tiene una personalidad propia que transmite un mensaje empoderador.
Rihanna, Miley Cyrus, Zendaya, hasta Úrsula Corberó. Miles de famosas han apostado por este look en busca de un cambio radical. Sin embargo, puede que no sepas que hay miles de estilos, y que en función de tus rasgos y texturas, necesitarás un tipo de corte u otro.
Mullet, el corte de aquellas que buscan rejuvenecer
Lo primero que has de saber es que este corte de pelo no es nuevo. Es más, al pensar en él, enseguida nos viene a la mente el estilo grunge de la década de los 80. “Se ha convertido en súper tendencia. Es un estilo que se caracteriza prácticamente por dos cortes en uno, en la parte de atrás más largo y capas desordenadas mientras que en la parte delantera y los lados son más cortos y ordenados”, cuenta Juandiegoteo, hair designer y embajador de Redken.
Las viejas lenguas cuentan que su origen se remonta a las antiguas civilizaciones de Egipto y Grecia, y tal y como nos cuenta Noelia Jiménez, estilista y propietaria del Salón Noelia Jiménez, en 'La Ilíada', Homero ya habla de hombres que llevaban mechones cortados y el pelo largo en la nuca, características que pueden atribuirse a este corte. “Probablemente, en esta etapa tenía fines utilitarios, dejando la parte delantera más corta para poder tener buena visibilidad y las capas más largas detrás para mantener el cuello protegido del sol y del frío”, añade.
No obstante, y a pesar de estar también muy presente en la Revolución Francesa (más concretamente en los sans-culottes franceses), a día de hoy es considerado un corte unisex que revolucionó el estilismo capilar en los 80 de la mano de estrellas del rock como David Bowie. Además, “en los últimos años ha vuelto con más fuerza que nunca, acaparando el protagonismo de numerosas pasarelas y alfombras rojas”, nos cuenta Jiménez.
Tipos de mullet
Como podrás imaginarte, existen muchos tipos de mullet, y cada uno depende mucho de los rasgos concretos que tenga una persona. A la composición facial, se le añade la textura del cabello y las necesidades. No obstante, la propietaria y estilista elabora una separación general que diferenciar fácilmente: mullet clásico y mullet moderno:
- Clásico. El corte mullet clásico se caracteriza por tener el cabello más corto en la parte delantera y en los laterales, mientras que la parte trasera se deja más larga. Esta diferencia de longitud entre la parte delantera y trasera es lo que define el estilo mullet.
- Moderno. Mantiene la esencia del estilo clásico, pero con algunas modificaciones. Puede incluir capas y texturas sutiles para agregar movimiento y estilo al cabello. También se puede jugar con diferentes longitudes en la parte trasera para lograr un aspecto más personalizado.
¿Es el único? Claro que no. De hecho, el hair designer es claro: el mullet tipo bob, el mixet, el mullet curly, el long mullet… Hay muchos, aunque destaca dos:
- Shullet. Es ideal para las que no se atreven con el mullet ya que es un estilo más sofisticado. Es un mix del mullet pero en versión más larga.
- Mixie. Para las que son un poco más atrevidas, creamos un estilo más desenfadado. Una fusión entre el mullet y el pixie. Este corte es más largo por arriba y más corto por detrás pero alargando las patillas.
Qué transmite una persona que lleva un corte de pelo mullet
Se habla mucho de las sensaciones y de la primera impresión que causa una persona con su corte de pelo. Y al fin y al cabo, por muy superficial que suene, vivimos y nos nutrimos de las primeras impresiones. Juandiegoteo habla de una persona atrevida, moderna y a la moda al hablar de una mujer con un mullet.
Por su lado, Noelia Jiménez se para un poco más a reflexionar sobre el concepto resultante. Coincide en que la imagen que se transmite es de alguien atrevido, aunque añade el conseguir un estilo único y audaz. “Este corte de pelo suele ser para personas seguras de sí mismas y con un estilo propio muy personal. No cualquiera se lo hace”.
El mullet a través del tiempo
Todo evoluciona, y los cortes de pelo no se iban a quedar atrás. Si hablamos de los inicios del mullet, es inevitable no mencionar sus cambios de forma y estilo. “Al principio, era un corte de pelo más exagerado y llamativo, mientras que en la actualidad ha adquirido una apariencia más sutil y versátil, adaptándose a diferentes estilos y tendencias”, opinan desde el Salón Noelia Jiménez.
También merece la pena hacer hincapié en un aspecto fundamental que pone el hair designer sobre la mesa: los cortes de pelo se fusionan con otros estilos. Y eso es inevitable. “En peluquería, algunos estilos siempre acaban fusionándose con otros y esto ocurre porque tenemos que adaptar el corte a cada tipo de rostros y, en ocasiones, se da a luz a otros estilos capilares”.
Qué productos capilares necesita un mullet
Cómo lo cuides en casa (y cómo lo estilices) importa y mucho a la hora de verse bien con él. El embajador de Redken nos da sus consejos fundamentales: “Hay que lavar, acondicionar y secar bien el cabello, primero con toalla, a toquecitos, y, después con el secador”. Después recomienda aplicar antes un protector térmico, y “si tienes maña, puedes peinar tu cabello con productos tipo ceras y, si no te ves capaz, un poco de laca te salvará. Utiliza tus dedos para definir un poco más el flequillo y los mechones de las capas”, concluye.
A quién le queda bien el mullet
Si se personaliza bien, a todos. No obstante, ambos expertos coinciden en cuatro tipos de rostros generales:
- Cara ovalada. Suele quedar bien en caras ovaladas, ya que este tipo de rostro tiene proporciones equilibradas y armoniosas. El mullet ayuda a resaltar los rasgos faciales y agregar personalidad al look.
- Cara redonda. En las caras redondas crea una apariencia más alargada y estilizada. Se recomienda dejar el cabello más largo en la parte trasera y evitar que el corte sea demasiado corto en la parte delantera, para evitar resaltar la forma redonda del rostro.
- Cara cuadrada. En este caso, suaviza los rasgos angulares de las caras cuadradas. Se puede jugar con las capas y la longitud del cabello para crear equilibrio y suavidad en el rostro.
- Cara alargada. Consigue un rostro más equilibrado y proporcional. Se recomienda dejar el cabello más largo en los laterales y en la parte trasera para agregar volumen y anchura al rostro.