Con el paso de los años, nuestra imagen, pero sobre todo, nuestra piel cambia significativamente. No somos las mismas a los 20 que a los 50 años y esto es, precisamente, porque las dosis de agua, colágeno y elastina que conforman nuestro organismo, entre muchas otras células, han ido disminuyendo por el camino. Como nos explica Yvette Pons, facialista y experta en estética, “a los 50 años, la piel ha pasado y pasa por cambios significativos. En ocasiones, se vuelve más delgada, seca y pierde elasticidad, lo que resulta en la aparición de arrugas más pronunciadas y  pérdida de firmeza”. 

Es entonces cuando las cremas denominadas ‘antiedad’ entran en el escenario, presentándose como ese aliado infalible para frenar la pérdida celular, rellenando y equilibrando esta pérdida natural con ingredientes externos, pero igual de efectivos que los formados orgánicamente. 

Crema hidratante y antiarrugas
Gtresonline

No obstante, no todo es tan idílico como dicta la teoría. Pese a ser un indispensable en las rutinas de las pieles maduras, las cremas antiedad no siempre son tan buenas como presumen en sus líneas y es, entonces, cuando debemos entrar en sus ingredientes y efectividad para valorar si, realmente, merecen o no la pena. 

Al menos, así lo hemos comprobado en cinco de los tratamientos mejor valorados por usuarias y especialistas los cuales, por su efectividad, formulación y precio, SÍ merecen la pena probar en tu próxima visita a la farmacia (porque sí, también pasan el filtro farmacéutico). Te contamos cuáles son, sus características y dónde puedes conseguirlos para enriquecer tu rutina cosmética en lo que resta de 2024. 

¿Qué entendemos como crema antiedad?

Eso sí, antes de entrar en materia, si eres de las que siempre le ha interesado el porqué de las cosas y, más concretamente, el porqué de las categorías en belleza, quizás te preguntes el porqué una crema antiedad se denomina como tal. Para resolverlo, la especialista Yvette Pons destaca que “para que una crema se considere anti-edad, debe incluir ingredientes y tecnología que aborde los  principales signos del envejecimiento cutáneo, como la pérdida de firmeza, la aparición de  arrugas, la falta de hidratación y la disminución de luminosidad.”  

No obstante, como destaca Pons, es importante atender al enfoque que damos a estas cremas de tratamiento, ya que, actualmente, está ganando fuerza el enfoque de well-ageing, “que no  busca detener el envejecimiento, sino vivirlo de manera saludable y plena, aceptando los cambios  naturales de la piel mientras se la cuida y se potencia su bienestar. Este enfoque se centra más en  promover una piel radiante y saludable a cualquier edad, en lugar de perseguir una juventud  eterna.”

Cinco ingredientes cosméticos que buscar en tu crema antiedad

Mientras, en lo que refiere a los ingredientes responsables de la mejora de los signos de envejecimiento, Marta Barrero y Elena Ramos, farmacéuticas, expertas en dermocosmética y directoras del centro de belleza The Secret Lab, defienden que “una buena crema antiedad necesita tener principios activos que estimulen la síntesis de colágeno y aclaren las manchas, como la Vitamina C y el Retinol.”

Junto a estos, “también puede llevar activos que produzcan un efecto “botox”, como puede ser el argireline, que relaja la musculatura para que no repitamos el gesto que nos provoca la aparición de la arruga. Así como es importante que la crema tenga acción exfoliante y regeneradora de la piel, para ir afinando la epidermis y así reducir la profundidad de la arruga”, añaden las expertas de The Secret Lab. 

Para simplificar estos must cosméticos y que, en tu búsqueda de la crema antiedad perfecta, sepas por dónde empezar a buscar (en lo que refiere a formulación), el  Dr. Manuel Ballesteros, dermatólogos de IMR, nos puntualiza cinco ingredientes fundamentales que deberían incluir, si o si, nuestras cremas antiedad: 

  1. Retinoides (como el retinol). Se tratan de derivados de la vitamina A que se han utilizado durante años para tratar el envejecimiento de la piel al estimular la producción de colágeno, mejorar la renovación celular y reducir las arrugas finas. Junto a la crema solar, “se trata del activo más estudiado y contrastado científicamente en la prevención del fotoenvejecimiento. Es importante recordar que su aplicación se debe realizar por la noche, y la introducción del mismo en nuestra rutina de skincare debe ser paulatina con una o dos aplicaciones a la semana con incremento progresivo según tolerancia”, destaca el dermatólogo.
  2. Vitamina C. También conocida como ácido ascórbico, se trata de un potente antioxidante que ayuda a neutralizar los radicales libres generados por la radiación UV. Además, como señala Ballesteros, “también juega un papel importante en la síntesis de colágeno, una proteína esencial para la elasticidad de la piel.”
  3. Niacinamida. Este activo tiene propiedades antiinflamatorias y antioxidantes, y se ha estudiado por su capacidad para mejorar la textura de la piel, reducir las manchas y aumentar la elasticidad. 
  4. Vitamina E. Hablamos de otro antioxidante clave que, en palabras de Manuel Ballesteros, “ayuda a proteger la piel del estrés oxidativo causado por la radiación UV.”
  5. Ácido hialurónico. Uno de los humectantes favoritos del sector de la belleza. Este, como nos explica el dermatólogo de IMR, es una sustancia natural que se encuentra en la piel y que ayuda a mantenerla hidratada y con un aspecto juvenil. “Los productos que contienen ácido hialurónico pueden ayudar a reducir la apariencia de líneas finas y arrugas, al favorecer la captación de agua en las capas más superficiales de nuestra piel, pero no se ha visto que aumenten la producción de colágeno dérmico como sí ocurre con el retinol”, concluye el especialista. 

Las mejores cremas antiedad calidad-precio que las +50 agotan en farmacia

¿Quieres poner en práctica todos estos conceptos teóricos? O, sencillamente, ¿eres de las que prefiere aprender de los ejemplos? Para ayudarte a profundizar en la cosmética ‘antiedad’, desde Lecturas hemos seleccionado hoy cinco de las mejores cremas antiedad por su relación ‘calidad-precio’, con un fórmula potente y a un precio muy competitivo. Escoge tu favorita.