Aunque desde que salió a la luz el asesinato de Edwin Arrieta (44 años) no han dejado de llegar informaciones, hace unos días el caso daba un giro cuando una persona suplantó la identidad de Daniel Sancho (29 años) en redes sociales. El individuo se dedicó a subir imágenes y vídeos inéditos del hijo de Rodolfo Sancho (48 años) y a dejar caer frases lapidarias. Pero, ¿Cuáles eran sus intenciones?
Según Joana Morillas, colaboradora en 'Fiesta de verano', se trataría de una persona "muy cercana" con la que Daniel habría compartido viajes a Tailandia. Esto provocaría que ese individuo tuviera "mucho material" sobre el hijo de Silvia Bronchalo y estaría dispuesto a publicarlo.
¿La razón? De acuerdo con Morillas, ese amigo traidor buscaría hacer públicos algunos detalles privados de la vida del chef, que lo podrían dejar en muy mal lugar ante la opinión pública. Y no solo eso. La familia y amigos de Daniel tendrían miedo que esa cuenta diera a conocer la identidad de la novia del acusado, Paula.
Sería con ella con la que Daniel estaba pensando casarse antes de suceder el crimen de Edwin. La familia de Daniel no quiere que nada de esto suceda bajo ningún concepto por lo que habría tomado las medidas necesarias para protegerle de esa cuenta falsa.
La periodista añadía que la persona que se esconde detrás de esta identidad falsa sería del círculo cercano de Daniel. “Este amigo no es español, tiene otra nacionalidad, hasta aparece en esas fotos”, apostillaba dando muestras de que podrían conocer casi con exactitud quién estaría detrás del mencionado perfil que tantos quebraderos de cabeza le está dando.
“Nadie tenía acceso. Tengo claro que es una persona muy cercana con la que ha compartido viajes a Tailandia. Es alguien que tiene mucho material”, agregaba la periodista. Así volvían a estrechar el círculo indicando que se trataría de una persona con la que el hijo del actor tuviera mucha relación, ya que el contenido de las imágenes es totalmente verídico.
El perfil falso de Daniel Sancho
La semana pasada apareció un perfil que se hacía pasar por el nieto de Sancho Gracia. Lo verdaderamente extraño de todo era que el cocinero español estaba incomunicado en la prisión de Koh Samui, únicamente recibiendo las visitas de su madre y de su abogado tailandés. Por ello resultó raro, ya que en la cárcel no cuentan con teléfono móvil ni acceso a internet y muchísimo menos a las redes sociales, donde pudiera colgar vídeos como estaba haciendo.
En el mencionado perfil de Instagram se comparten fotografías que son reales, a las cuales solo puede tener acceso alguien del entorno cercano del hijo del actor, ya que en el perfil del propio Daniel Sancho no se encuentran las citadas instantáneas. Sin embargo, el contenido de los mensajes que se añaden sí serían falsos, ya que revela datos sobre la fecha del juicio, a pesar de que todavía no exista de manera oficial porque la policía continúa recabando información sobre el caso.
“Hoy conocí a un buen amigo. Se llama Carlos Alcañiz. Está preso desde hace varios años. La gente de Tailandia me empieza a ver con mala cara. No sé qué se está diciendo mucho afuera. No puedo usar mi móvil para ver noticias. Tengo a la policía monitorizándome a diario”, escribía en una de las historias que compartía, las cuales solo permanecen 24 horas visibles para después desaparecer.
“Si se preguntan cómo hago para usar un móvil, muy fácil. Le pago al policía 500 baths, que son como 10 euros, para que me deje usarlo unos diez minutos”, añadía. De este modo ponía de manifiesto que podía hacer uso de las redes sociales si realizaba un pago a los funcionarios de la prisión, algo totalmente incierto.
La pregunta que hizo Daniel Sancho al juez
Desde el primer momento hemos podido conocer que el autor confeso del crimen al médico colombiano había hecho una extraña pregunta tanto al juez como a las personas con las que había mantenido contacto. El chef se preguntaba si su caso estaba siendo mediático, algo que ya nos habían indicado en anteriores comparecencias los encargados del caso en Tailandia y los portavoces de la familia en España.
Ahora se ha conocido que también se habría interesado en exceso por conocer si el tiempo que está pasando en la prisión de Koh Samui le terminaría restando días a su condena final, una vez que la sentencia sea firme por parte de la fiscalía tailandesa. Esta pregunta tendría sentido en el caso de que no se le condenase a pena de muerte, tal y como ha pedido la policía, ya que si la resolución es distinta, Daniel podría pasar ocho años en las cárceles del país asiático para después poder conmutar la pena en nuestro país, algo que le acabaría restando días.