Tom Cruise, así ha evolucionado su rostro

En su última aparición lo hemos visto visiblemente más cambiado

Tom, un placer saludarte, a ti, y a tu nueva cara.

No lo vamos a negar. Nos va a costar acostumbrarnos a ella al principio, pero, al final, terminaremos por conseguirlo. Lo pudimos hacer con Camilo Sesto y con él la cosa fue exagerada, ¡como para no lograrlo contigo!

El actor, al que no veíamos desde diciembre, y cada vez tiene menos presencia en alfombras rojas, ha acudido a los premios Bafta 2016. Allí ha entregado el premio a mejor actor a Leonardo DiCaprio, quien, imaginamos, cuando lo recogió lo miraría extrañado sin ubicar muy bien al desconocido que tenía delante. Normal, Leo, nos hubiese pasado lo mismo.

Pero, ¿en qué ha cambiado su rostro? Pues, principalmente en que ahora presume de unas mejillas más redondeadas. Donde nunca hubieron mofletes, ahora reposan unas manzanas turgentes y llenas de vitalidad. ¿Ha ganado peso? No lo creemos. Lo más probable es que este cambio físico pueda deberse a inyecciones que ofrecen nuestra versión más firme, y que consiguen que rostros huecos se llenen de colágeno, que devuelve a la cara su apariencia más juvenil. ¿Quizás demasiado? Quizás, pero si él está conforme con su cambio, nada más que añadir. Nosotros también lo estamos.

Hemos realizado una evolución de su cara desde 1980, cuando él era un pipiolo tratando de abrirse un hueco en Hollywood, hasta ahora, convertido en una figura consagrada. Su carrera ha cambiado y también lo ha hecho su rostro, y no solo por el paso de los años, sino, también, por el avance de la tecnología en cuestiones de belleza.