Todo sobre la lujosa propiedad de Alejandro Sanz donde vivió su amor con Rachel Valdés

Tras cuatro años de relación Rachel Valdés a abandonado la casa de Alejandro Sanz en Madrid en la que vivieron su amor

Noelia Zazo
Noelia Zazo

Periodista especializada en corazón

Alejandro Sanz collage

No corren buenos tiempos para el rey de las canciones románticas, tras confesar un bajón anímico importante, se ha confirmado que Alejandro Sanz (54 años) había roto su relación con su expareja, la escultora cubana Rachel Valdés a la que conoció en 2019. Todo comenzó el pasado 27 de mayo, cuando en un Twitt el cantante expresaba el mal momento por el que estaba pasando: “No estoy bien. No sé si esto sirve de algo, pero quiero decirlo. Estoy triste y cansado. Por si alguien más cree que hay que ser siempre una brisa de mar o un fuego artificial en una noche de verano. Estoy trabajando para que se me pase… llegaré a los escenarios y algo dentro me dirá que hacer. Pero a veces no quiero ni estar. Literalmente. Sólo por ser sincero. Por no entrar al ruido inútil. Sé que hay gente que se siente así. Si te sirve, yo me siento igual”. Tras estas palabras llegaron las reacciones, las informaciones y el bombazo, la ruptura con Rachel Valdés.

Sin embargo, solo una semana más tarde y tras otro mensaje en el que agradeció el cariño recibido y dijo que poco a poco comenzaba a ver la luz, quiso dejar algo muy claro, algo que ya había dejado caer sobre el escenario del primer concierto de su gira en Pamplona, y es el hecho de que Rachel nada tiene que ver con su bajón personal. De sus palabras, que fueron exactamente estas; “estoy escuchando y leyendo muchas cosas que no me gustan. Quiero dejar claro que Rachel Valdés es una mujer increíble, a la que admiro y de la que solo puedo decir cosas buenas. Mi estado de ánimo nada tiene que ver con ella. Pido respeto para ella y su trabajo. Rachel, cariño, tú enfócate en tu obra y sube el volumen de tu arte”, se deduce que la ruptura es un hecho, pues no desmiente ese punto, aunque le reconoce el cariño.

Un cariño que han vivido durante casi cuatro años, pues se conocieron en el verano de 2019, pasaron juntos todo el confinamiento por la COVID 19 en 2020, lo que sin duda es una prueba de fuego, y han mantenido su relación hasta este 2023. Se desconoce en el qué momento exacto tomaron la decisión de tomar caminos separados, según las informaciones que se han barajado, los últimos meses las cosas no iban bien y en las últimas semanas ella ha recogido sus cosas de la casa que compartían y se ha marchado a Barcelona, la ciudad donde estudió y de donde es el padre de su único hijo.

La lujosa propiedad de Alejandro Sanz

Atrás deja el chalet de Somosaguas donde se ha ido fraguando su historia de amor. De hecho, es una casa que estrenaron como pareja, pues se trasladaron allí después de que el cantante, cuando debió poner en orden sus finanzas tras despedir a Rosa Lagarrigue, que había sido su mánager durante 25 años, vendió su mansión en la exclusiva urbanización La Finca (Pozuelo de Alarcón), aunque nada tiene que envidiarle esta nueva propiedad. Se trata de una vivienda unifamiliar de 2.000 metros cuadrados sobre una parcela de 6.700. La casa está dividida en dos plantas y en ella imperan los espacios abiertos y los colores claros que aportan una luz de la que por su construcción cúbica disfruta casi todo el día. Además, tiene un jardín muy grande con piscina privada, un cenador en el porche, gimnasio y garaje.

Pero lo más llamativo, y lo que sin duda fue una de las primeras cosas que se instalaron en la vivienda, es un estudio de grabación, el rincón de Alejandro, en el que además compone y hace pruebas con total libertad. Rachel, sin embargo, tenía su local para trabajar fuera de la vivienda, de hecho, estaba y según reza su página web continúa estando en otra localidad, pues las piezas, tanto cuadros como escultura, sobre los que ella trabaja, tienen unas dimensiones que imposibilitan ubicarlos en cualquier sitio, se necesita un lugar muy grande para ello.

El cemento y el mármol son además dos de los materiales que más se aprecian en los rincones que ellos mismos han ido enseñando a través de sus redes sociales, pues toda la decoración es un poco de estilo industrial, minimalista, en la que rompe una gran cantidad de plantas ubicadas en diferentes rincones. Pero sin duda uno de los grandes atractivos de la vivienda que Rachel ha abandonado es su ubicación, pues la zona en la que se encuentra está a las afueras de Madrid, por ello gozan de tranquilidad y zonas verdes muy cercanas, pero a su vez está a solo unos 20 minutos en coche del centro de la capital, lo que es perfecto para atender compromisos laborales o sociales cuando se requiere.

Ahora, entre esas mismas paredes, Alejandro está trabajando para salir adelante tras un momento difícil, para recomponerse, afrontar una nueva etapa y volver a disfrutar y a hacer disfrutar a sus muchísimos fans encima de un escenario, pues si algo tiene claro es que cantar, es lo que nunca va a dejar de hacer.