La terrible tragedia que marcó a la vida de Pablo Castellano: así vivió la muerte de su padre

Pablo Castellano vio, con tan solo 23 años, como él y su familia se quedaban sin dinero por una mala gestión de la herencia de su padre

Lorena López
Lorena López

Periodista especializada en corazón y televisión

Pablo Castellano
Gtres

La vida de Pablo Castellano (37 años) cambió por completo en 2010. Cuando apenas tenía 23 años. Al empresario José Luis Castellano, su padre, le acaban de diagnosticar un cáncer de colon. Sin embargo, fue infarto inesperado lo que poco después terminó con su vida. Su familia no estaba preparada para perderle, pero sí que agradecieron que no tuviera que enfrentarse a la dura enfermedad. Evitaron "evitar verle enfermo" con solo 57 años.

Asimilar la pérdida de un padre a los 23 años es duro. A este duelo Pablo Castellano tuvo que sumarle los problemas económicos que su familia atravesaba. Eran consecuencia de mala gestión que habían hecho hasta entonces de la herencia que había dejado su padre.

Tanto él como su hermano mayor, Jacobo, trabajaban en la empresa que fundó su progenitor: Archarray, construcciones y servicios. Pero la que era la mujer actual de su padre decidió venderla y dejarles sin nada. Esto provocó que ambos se distanciaran de sus otros tres hermanos, los que su padre tuvo con ella. "Cuando mi padre falleció no terminó de dejar las cosas bien. La que era la mujer de mi padre no respetó las decisiones que él hubiera querido. Hizo todo lo contrario y por diferencias acabamos separándonos", contó Pablo Castalleno a Claudia Osborne en 'Mi casa es la tuya'.

Fue una época difícil. Pasaron de ser una familia con bastante solvencia económica a verse con ciertas dificultades. "De la noche a la mañana nuestro padre se va y en cuestión de 15 días no tenemos nada. Absolutamente nada. Cuando digo nada es nada. No teníamos ni un euro en la cuenta para poder encender la luz de casa ni la calefacción, estábamos con abrigos en casa, con velas… porque no teníamos dinero para pagar nada", confesó en una entrevista en 2023 en ‘Magistral'.

 

Su vida cambió por completo. Se sobrepusieron a las difícultades con ese espíritu luchador que le había enseñado su padre. Pablo y Jacobo crearon su propia empresa: "Mi hermano mayor y yo tuvimos que empezar de cero y creamos una y quisimos mantener el nombre llamándola 'Archarray e hijos'". Los inicios no fueron sencillos.

"Mi hermano Jacobo tuvo que pedir su paro adelantado y yo el mío, que creo que eran 9.000 o 10.000 euros. Además, me tuve que poner a trabajar por la noche de relaciones públicas", añadió el marido de María Pombo. Se enfrentaron a trabajos a los que no estaban acostumbrados. Empezaron desde cero para poder tener la empresa de construcciones que es hoy. "Nuestra primera obra fue un baño de tres metros y pintar una oficina. Ahora suena más por las redes, hacen mucho ruido, pero ha sido una evolución muy poco a poco", contaba. A día de hoy la empresa cuenta con 60 empleados y es un referente del sector.

Lo que Pablo Castellano aprendió de su padre

Pablo Castellano no quería seguir los pasos de su padre en lo laboral. Su sueño siempre había sido ser piloto de motociclismo. Pese a esto, decidió empezar a trabajar con él para aprender de la empresa familiar: "Iba a la universidad por las tardes, entonces iba por las mañanas a la oficina y estaba más en tema administrativo". Pese al aprendizaje que tuvo, sabía que él no quería ser un empleado más y que, en algún momento, montaría su propia empresa. Estas ‘prácticas’ le sirvieron a posteriori, cuando tuvieron que empezar de cero tras la muerte de su progenitor.

"De mi padre he aprendido a tener paciencia y mano izquierda con los clientes porque cada cliente es un mundo. Mi padre era una persona muy trabajadora. La muerte de nuestro padre lo que hizo fue abrirnos una puerta. A pesar de la desgracia, nos hizo crecer de golpe", aseguró con total convencimiento de que, pese a todo, supieron salir del bache gracias a las enseñanzas de su padre. De él, sigue acordándose cada día. Una muestra de ello es lo emotivo que fue para él tocar con Los Burning en 'El Desafío'. 

Pablo Castellano acabó roto tras la actuación con este mítico grupo de rock. Tenía que tocar la batería junto a ellos, pero, además de ser un referente patrio, también era una muy especial para su padre. José Luis Castellano había tocado con ellos 40 años atrás. "Me hubiera encantado que estuviera mi padre, que sé que estará mirando desde arriba", confesó emocionado.