Tamara Falcó da la cara y se confiesa por primera vez sobre su comentada crisis con Íñigo Onieva

Tamara Falcó ha vuelto a sentarse en la mesa de 'El Hormiguero'. Cada jueves, la marquesa de Griñón protagoniza una tertulia junto a Juan del Val, Nuria Roca y Cristina Pardo para analizar los temas de actualidad. En muchas ocasiones, es la propia Tamara la protagonista de algunos de ellos. Pablo Motos (58 años) ha querido aprovechar la presentcia de la hija de Isabel Preysler para preguntarle por la última polémica que ella e Íñigo Onieva han protagonizado. 

Pablo Motos pregunta a Tamara Falcó por los rumores de crisis con Íñigo Onieva

"He leído que estáis en crisis", le ha dicho sin tapujos Pablo Motos. Tamara ha querido zanjar los rumores y ha dejado claro que lo que realmente está ocurriendo es que hay gente haciendo guardia en la puerta de su casa. 

La ambigua respuesta de Tamara Falcó sobre su supuesta crisis con Íñigo Onieva

"Dicen noticias de mentira de mí continuamente. hay gente que se cree con derecho para mirar desde la calle con prismáticos. He tenido prensa en la calle todo este tiempo. Te miran desde la calle con prismáticos, que es algo que debería de estar prohibido. Pero, claro, a ver cómo lo pruebo", ha dicho ante la posibilidad de emprender acciones legales sobre los hechos que comentaba. "¿Te voy a meter una denuncia que tarda 15 años y mientras tanto yo me desgasto? Pues no. Intento que esto no me agobie", ha añadido. Sin embargo, no ha profundizado de forma tajante en los rumores de crisis con Íñigo Onieva ya que en ningún momento ha hecho mención directa ni al tema ni a su marido.

Tamara intenta verlo desde un punto de vista positivo. "Lo que me parece funcamental es que me he mudado un sitio en el que entro con mi coche directamente. Tengo gimnasio dentro de mi edificio y voy a casa de mi madre con mi coche. Estoy supertranquila", ha insistido. Sin embargo, Juan del Val no opinaba igual que ella: "Me parece algo significativo. Estás a gusto, pero te estás escondiendo". "Me estoy protegiendo", le ha corregido su compañera de tertulia. 

La marquesa de Griñón ha optado por amoldar su rutina a la realidad que le rodea. "Puedo salir a dar un paseo, pero me resulta muy complicado. Tengo la suerte de ir a unos sitios donde estoy protegida y no tengo un periodista que me está lanzando preguntas sobre mi familia, mi marido… para ver si finalmente reacciono", ha expuesto.

Son muchos los que dicen que eso de ser famoso tiene sus gajes del oficio. "Hay quien dice que si eres famoso, este tipo de cosas va en el suelo", ha reflexionado Juan del Val. "Hay que empatizar y ver que hay una persona que no tiene libertad", ha añadido. "Es como me lo explicó Pablo. Venimos aquí, trabajamos, pero después tenemos una vida y queremos estar tranquilos. Al camarero, cuando termina su horario, nadie le pide una ración de calamares", ha comentado Tamara. "Pablo nos contrata y es un trabajo público. Eso implica que todo el mundo tiene derecho a opinar de lo que hacemos y decimos aquí, pero ahora déjame ir a un restaurante a cenar", ha insistido el escritor.

Pablo Motos recuerda su ajetreada salida con Isabel Preysler

Pablo Motos también ha sentido esa presión de la prensa. "No me hicieron el nuevo novio de tu madre por un minuto. Fuimos a una inauguración y después a cenar. Todos teníamos prensa, pero era tu madre el centro de atención. El resto éramos mariachis. A ella no paraban de hacerle preguntas", ha recordado el presentador de 'El Hormiguero'.

La cena se alargó y abandonaron el restaurante sobre las dos de la mañana. "No entendía por qué seguían ahí si ya nos habían hecho todas las preguntas. Tu madre me dijo que era por si ella salía con un nuevo novio", ha confesado. Pablo Motos aseguraba haberse convertido en un profesional de coger a famosos del brazo. "Cuando Pilar estaba con los rumores de ruputra, ahí estaba yo. Con tu madre, ahí estaba yo. Soy el sujetavelas oficial", ha comentado.