La situación económica de Rafa Mora convertirse en policía local: comida rápida saludable, pisos en alquiler y negocios lejos de la televisión

Rafa Mora (41 años) es de las pocas personas en este país que puede presumir de haber ganado un trabajo en un reality, y es que su silla en ‘Sálvame’ fue el premio tras ganar la ‘Sálvame Snow Week’, una convivencia que hizo con otros rivales y que terminó con el valenciano y Laura Fa haciéndose un hueco en las tardes de Telecinco. Fue un antes y un después en su vida, sin duda, y se convirtió en uno de los colaboradores más polémicos del formato, y eso que en ese sentido tenía mucha competencia. Hizo por igual amigos y enemigos y es una etapa que, quienes continúan manteniendo amistad con él, saben que recuerda con mucho cariño.

Pero ahora ha pasado página. Ya no se dedica a la televisión, y ha conseguido sacarse una de las oposiciones más complicadas: la de policía nacional. Mientras que sus excompañeros se preparan para dar el salto a las tardes de TVE, él está muy centrado en otras cosas que nada tienen que ver con el mundo del entretenimiento y sí con el de las empresas.

Los negocios de Rafa Mora fuera de la televisión

Si bien cuando aún estaba en televisión su sueño era ser periodista y durante algún tiempo estuvo estudiando, finalmente, meses antes de que el formato llegara a su fin confesó que lo había dejado, alegando entre bromas que no lo necesitaba. Pero aunque ha aparcado por completo la carrera de Comunicación, no ha parado de estudiar, porque nada más salir por la puerta de Telecinco tomó la decisión de apostar por prepararse las oposiciones para obtener una plaza de Policía Local en el municipio de Alcobendas, siguiendo así los pasos de su chica.

Macarena, fue su gran inspiración durante todo el proceso. Ella ya hace tres años que tiene su plaza como policía en San Sebastián de los Reyes, y ha sido su gran consejera. Y tan bien lo hizo que Rafa logró sacarse la plaza sin problema. Ahora ya puede decir que tiene trabajo indefinido, aunque, lo cierto es que este no es su única fuente de ingresos.

 

 

 

 

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De hecho, una de sus últimas tardes en el plató de 'Sálvame' lo dejó claro. Dijo que durante todos sus años en televisión había ido haciendo inversiones y que podrá vivir de ellas con total tranquilidad. Y es que a lo largo de los años ha ido comprando viviendas que tiene alquiladas, sobre todo en la Comunidad Valenciana, y que le reportan un dinero fijo al final de mes, porque algunas, según sus propias palabras, las compró al contado, sin necesidad de hipoteca, lo que le deja ganancias prácticamente limpias de su arrendamiento.

Actualmente, el excolaborador tendría en su poder un total de 6 propiedades, de las que cinco mantiene alquiladas. La sexta es el gran oasis para toda su familia y únicamente la tiene destinada para el uso y disfrute de los Mora. 

Y eso no es todo. En un podcast sobre inversiones económicas, Rafa Mora habló de otro proyecto del que, hasta ahora, desconocíamos. "Tengo participaciones en una empresa, concretamente en City Poké. Actualmente, son ya 12 restaurantes los que tenemos en la zona de Levante, en Badajoz y otro en Castelldefels. […] Es todo comida sana. Es un negocio que va muy conmigo, que soy una persona a la que le gusta cuidarse. Yo llevo la parcela del marketing, de influencers...", aseguró en el programa. 

Los inicios en televisión y su salto al estrellato

Y es que, aunque pueda parece una locura, Rafa ya tenía una larga trayectoria antes del programa vespertino, pues fue uno de los primeros (y exitosos) tronistas del extinto 'Mujeres y Hombres y Viceversa', programa en el que conoció a Tamara Gorro, con la que tuvo una escueta pero mediática relación y en el que durante muchísimo tiempo fue lo que llamaban ‘asesor del amor’ e íntimo amigo del entonces matrimonio formado por Pipi Estrada y Miriam Sánchez, lo que le abrió las puertas a conocer a mucha gente del mundo de la televisión.

Aunque para eso se sirvió solo, pues hizo viral su mítico “me rio en tu cara” cuando aún casi ni existían las redes sociales, y vivió en todo su esplendor los años en los que los rostros televisivos hacían bolos en discotecas a las que acudían sus fans en masa para fotografiarse con ellos, lo que hizo que sin duda amasara una buena fortuna. Y ahora, como no podía ser de otra forma, también está explotando las redes sociales, donde publica sus entrenamientos, sus dietas y es imagen de diferentes marcas, sobre todo algunas de suplementación para deportistas, algo que parece interesar mucho a sus más de seiscientos mil seguidores.

Ser padre, el sueño por cumplir de Rafa Mora

Aunque la televisión le ha dado más de lo que esperaba. Si de hay algo que está orgulloso es de su familia y del amor que vive cada día al lado de Macarena Millán. A pesar de algunas idas y venidas, Rafa Mora encontró en esta joven catalana la estabilidad sentimental que necesitaba después de años de locura y desenfreno. Juntos llevan más de nueve años de relación. Y aunque han vivido algún que otro bache, sobre todo uno público en el que ella llegó a quedar con uno de sus ex, finalmente lo superaron todo y se podría decir que se encuentran en uno de sus mejores momentos. 

Ambos comparten con naturalidad su vida juntos, viven en Madrid y viajan siempre que pueden, están muy apegados a sus familias y la única incógnita que hay a su alrededor es si finalmente se casarán. Entre los planes de Rafa siempre ha estado casarse con su novia. Una gran boda que lleva rondando en su cabeza desde que anunciaron su compromiso en 2019, pero que han ido posponiendo por razones que se desconocen. 

Otro de los planes de vida a los que Rafa no quiere renunciar es el de ser padre. A sus 42 años, el que fuera colaborador de televisión sueña con formar su propia familia con Macarena, una idea que han ido retrasando por las obligaciones profesionales de ella. "Los hijos vendrán cuando Macarena termine la carrera de Pedagogía", explicaba allá por 2022. Ahora que Macarena ya ha terminado sus estudios y cuenta con un puesto de trabajo fijo, no hay nada que les impida cumplir todos estos sueños que tienen por delante. Sea como fuere, están juntos, felices y con la economía en auge. No pueden pedir más.