A los pocos meses de instalarse en Oporto en 2015, a Sara Carbonero ya le dio por los libros y los apuntes cuando, motivada, se puso a aprender portugués. Ahora y 12 años después de haber pasado por la facultad, se ha dicho a sí misma que ya basta que eso de seguir arrastrando asignaturas es un quebradero de cabeza que de tanto en tanto vuelve a su cabeza y que es ahora o nunca el momento de conseguir sacarse la carrera de Periodismo.
La presentadora no pudo completar sus estudios, pues en segundo de carrera ya empezó a trabajar a tiempo completo en La Sexta y era incompatible con su formación. Se encontraba en la encrucijada del trabajo o los estudios, y Sara decidió colgar los libros. La decisión no fue mala del todo, porque sabía que a los estudios podría volver cuando estuviera más tranquila y con la posibilidad de combinarlo con otros proyectos sin acabar loca o desmotivada.
Aunque su vida ha dado un vuelco de 180 grados y su situación es totalmente distinta, está deseando ver colgado en una de las paredes su título de licenciada en Periodismo. Carbonero empezó a estudiar antes de que se empezara a aplicar el Plan Bologna, por lo que tiene que darse prisa si no tiene ganas de que el cambio en el plan de estudios de la carrera aún pueda jugar en su contra y resultarle más costoso conseguir sus objetivos. De momento, estudiará a distancia desde Oporto y ya ha empezado a ver que fácil no va a ser. Para empezar, "los constipados y virus" que se han instalado en su casa y la han tomado con sus "peques". Eso ya son pequeños "problemas cotidianos" que fácil no se lo van a poder. Pero lo que realmente ha dejado un poquito de 'bajón' a Sara es que los años no han pasado en balde para su memoria, que 12 años son muchos años y que la capacidad de retener información y concentrarse no es la misma. "Yo antes tenía muy buena memoria, no me costaba memorizar las cosas y ahora…ahora me siento a veces como Dori en 'Buscando a Nemo”, confiesa en la última entrada de su blog. A pesar de todo, está "muy contenta y motivada" con la decisión que ha tomado. Desde aquí la animamos a que se ponga a fondo a ello que, como dice ella, "nunca es tarde" y, sobre todo, es un triunfo personal.