María del Monte (62 años) está viviendo un fin de semana amargo. La cantante ha dejado claro en todo momento, tras todo lo vivido en este último año, que la vida continuaba para ella y que iba a poner de su parte para disfrutar de todo lo bueno que le ha dado la vida, pero es inevitable que este 9 de febrero no traiga una sombra a su cabeza. Hace exactamente un año que todos conocíamos que Antonio Tejado, su sobrino, era detenido al ser considerado el presunto autor intelectual de una banda que perpetuaba robos con violencia en varias localidades de Sevilla, y entre estos robos destacaba el sufrido en la casa de María del Monte.
María del Monte y su esposa, Inmaculada Casal, eran sorprendidas en plena noche y se convertías en víctimas de un peligroso asalto en el que fueron agredidas y que vivieron con auténtico terror. Los ladrones se llevaron todos sus enseres, un botín de más de un millón de euros. Antonio Tejado entraba en prisión tras ser considerado el autor intelectual de este robo que tuvo lugar meses antes, en concreto el 24 de agosto de 2023.
Desde ese momento la familia de María del Monte inevitablemente se fracturó. La cantante, que siempre dejó claro que confiaba en la presunción de inocencia, tuvo que afrontar el dolor de la detención de su sobrino con revivir la pesadilla de que esta fuera por el robo de su propia casa y también empatizar con la situación en la que quedaba Inmaculada Casal, también víctima del robo, en el que también estaban su hija y su yerno.
La ruptura familiar de María del Monte en su aniversario más amargo
Durante los casi 100 días que Antonio Tejado estuvo en la cárcel María del Monte no visitó a su sobrino, a pesar de que siempre le ha considerado como un hijo. Además del morbo mediático que esto supondría, la artista nunca ha ocultado el profundo dolor que esta situación le ha generado y lo complicado que ha sido continuar adelante con sus vidas tras todo lo vivido: declaraciones, conversaciones complicadas, una familia rota y detalles sobre el asalto a su casa que quisiera poder olvidar. Pero no, no es nada fácil y es que lo que tanto María del Monte como Inmaculada Casal han tenido que vivir les ha marcado profundamente y para siempre.
Esta complicada situación se dejó ver especialmente la pasada primavera cuando ni María del Monte ni su pareja Inmaculada Casal fueron invitadas a la boda de la sobrina de la artista. Era la periodista Gema López quien en 'Espejo Público' daba detalles de la situación familiar de María del Monte, meses después no parece haber cambiado nada. Al menos no ha habido ningún movimiento que diga lo contrario. "Hay dos bloques. Para la familia no se está haciendo todo lo bien que se debería estar haciendo... El 18 de mayo se casa la única sobrina mujer de María del Monte, hija de su hermano pequeño, y María del Monte e Inmaculada Casal no están invitadas", contaba López en el matinal de Antena 3.
![María del Monte e Inmaculada Casal](data:image/svg+xml,%3Csvg xmlns="http://www.w3.org/2000/svg" viewBox="0 0 1200 1797"%3E%3C/svg%3E)
María del Monte e Inmaculada Casal en el concierto de Marc Anthony en Sevilla.
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Ahora, un año después, todos estos sentimientos se remueven y más aún teniendo en cuenta que en los próximos días conoceremos nuevos detalles sobre la situación legal de Antonio Tejado, en libertad provisional. Concluida la fase de instrucción conoceremos los cargos de los que finalmente será acusado el sobrino de María del Monte, si aplica.
Aunque María del Monte ha vivido volcada en su familia, lo que ha tenido que vivir le ha superado completamente y tuvo que poner unos claros límites y es la de salvaguardar su salud mental y la de su núcleo duro. "Con los años se aprende tanto, se aprende tanto que sé que verdaderamente lo más importante del mundo es la salud. Si quisiera comprar un día de vida con todo el dinero del mundo no podría, cuando tienes el privilegio de estar sano… Estoy bien sin entrar en detalles, en la vida hay que arrancar, hay que vivir, y la vida te da sorpresas. Pero si hay salud, ves que todo lo demás tiene arreglo, he tenido la experiencia de ver cómo personas muy importante para mí se iban y no podía hacer nada, después de eso ahora todo está por debajo, la nota de corte está ya está baja", dijo María del Monte muy directa en su reaparición tras todo lo sucedido en 'El show de Bertín'.
![María del Monte y Antonio Tejado](data:image/svg+xml,%3Csvg xmlns="http://www.w3.org/2000/svg" viewBox="0 0 1200 1200"%3E%3C/svg%3E)
María del Monte y Antonio Tejado.
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Ahí contó: "Yo creo que no soy digna de lástima, mucha gente estará mucho peor que nosotros, no tenemos derecho a quejarnos. Escuché una vez una frase extraordinaria, que se me quedó, decía 'no mires lo que no tienes, mira lo que tienes y verás cuanto te sobra'. De todo se sale en la vida, teniendo salud y buenos amigos… Todo este tema está donde tiene que estar y no hay más". Y añadió: "Poco a poco, no hay que escatimar, tenemos una cultura reacia a pedir ayuda a los profesionales, y yo ahí no escatimo. Lo he hecho. Zapatero a tus zapatos, hay personas que te ayudan y esa ayuda hay que pedirla cuando se necesita, me está sirviendo".
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Una alegría para María del Monte
La relación con su sobrino y el entorno más cercano de este no es la más fluida, pero María del Monte tiene algo que celebrar y es que, ahora más que nunca, está muy cerca de Isa Pantoja. La hija de Isabel Pantoja, embarazada de su segundo hijo, ha hecho en los últimos meses unas duras declaraciones sobre los episodios que ha tenido que vivir con su familia. Su madrina, que siempre le ha tenido mucho cariño pero que ha vivido lejos de ella por su mala relación con Isabel Pantoja, hizo unas impactantes confesiones sobre Isa, que emocionaron a todos.
"Creo que por primera vez en mi vida, porque creo que hay que hacerlo y mi conciencia y mi corazón me dicen que lo haga, pero hasta aquí. Me parece una solemne barbaridad... Si lo que mi ahijada ha contado es así, me parece lo más fuerte que yo he oído en mi vida. Lo que más me ha impactado es el sufrimiento, cuando una persona a la que quieres sufre de esa manera, te cala hondo. Yo la he querido toda mi vida, quiero que sepa que estoy aquí. Si ha pasado por todo eso me parece indignante, no hay derecho. Hay veces en la vida que hay que ser prudente. Lo peor que le puede pasar al ser humano es que deje de ser humano", contaba en 'Y ahora Sonsoles', el programa en el que trabaja. Este acercamiento a la hija de Isabel Pantoja es un bálsamo tras muchos años de dolor por su situación y pérdidas familiares.