A las recién estrenadas mamás, les viene bien de vez en cuando tomarse un respiro del bebé –que suele absorber todas las horas del día y de la noche– y hacerse una escapadita, a ser posible en pareja y sin niños. Y eso es lo que han hecho Adriana Abenia y su marido: aprovechar el fin de semana para coger un vuelo y plantarse en una de las ciudades más bonitas de Europa y del mundo, Roma.
La propia Adriana explica en su stories que hacía mucho tiempo que no iba a Roma y que tenía muchas ganas de volver. La ciudad les recibió con lluvia, lo que no impidió que disfrutaran de su hospitalidad, de su historia y de su gastronomía. "AMO ROMA. Y, de vez en cuando, escapar con la pareja es importante para los que somos padres. Gracias @muchosolofficial por hacerlo posible en este palacio de ensueño ✨ Y a mis padres por quedarse con nuestra pequeña Luna ❤️", ha escrito Adriana esta mañana, en una imagen en la que aparece muy fresquita en la terraza de su hotel.
La periodista fue mostrando en su Instragram los distintos monumentos por los que pasaron, que no son pocos porque toda Roma es una lección de historia del arte. El Coliseo, la columna de Trajano, el foro romano... y, por supuesto, la emblemática Fontana di Trevi, uno de los lugares más visitados de la ciudad.
Una de las cosas que más ha llamado la atención de Adriana es que ha vuelto a su look de siempre, de rubia, después de que estos últimos días nos sorprendiera con su cabello moreno. Un cambio tan radical que no era fácil reconocerla, pero que le quedaba igual de bien.
Otra de las anécdotas vividas en su primer día en Roma fue que, a consecuencia de la lluvia, vieron a la loba capitolina cómo sus ubres goteaban líquido con el que 'alimentar' a Rómulo y Remo, fundadores de Roma según la leyenda. "Aquí la loba capitolina y como está lloviendo, les sale... ¡leche! Ya tenemos algo en común", dijo Adriana, entre risas.