Roberto Leal se rompe como nunca al hablar de su padre fallecido

Roberto Leal ha sido el invitado de Joaquín Sánchez en ‘El novato’ y se ha emocionado al recordar a su padre fallecido contando la espinita que se le ha quedado clavada

Sergio Rapado
Sergio Rapado

Periodista especializado en corazón y televisión

Roberto Leal
Atresmedia

La semana pasada Joaquín Sánchez (42 años) regresaba a la televisión por todo lo alto. Lo hacía con la entrevista a Ana Obregón (67 años), la cual se la había concedido en exclusiva tras el nacimiento de su nieta Ana Sandra. Esta semana el bético ha contado con otro invitado de excepción, como es el caso de Roberto Leal (44 años), el presentador de ‘Pasapalabra’. En la charla han pasado por todos los estados, emocionándose como nunca antes lo había hecho con un recuerdo sobre el padre del presentador.

Los dos andaluces han conversado y nos han hecho reír y mucho. El exfutbolista ha entrevistado al presentador, consiguiendo sacarle importantes detalles de su vida profesional pero también de la personal. Entre estos últimos ha narrado la forma en que conoció a su mujer y también se han unido a la entrevista la madre y la hermana de Leal que también han contado cómo era el sevillano de pequeño contando divertidas anécdotas sobre su infancia.

Roberto Leal se emociona al recordar a su padre fallecido

Joaquín comienza preguntándole sobre la admiración que sentía por su padre, el cual falleció pocos días antes de acabar el año 2019. “Mi padre era un hombre muy especial porque mi padre era albañil, trabajaba mucho fuera, él se iba muy temprano y llegaba tarde y cuando llegaba él cenaba antes que nadie porque quería cenar ya para acostarse pronto”, contaba sobre la profesión de su padre.

“Precisamente de esa personalidad que tenía tan potente, yo tenía una relación también muy cercana con él porque yo mis primeros trabajos fueron con él”, expresa. Además, cuenta que junto a él obtuvo sus primeros trabajos. “Yo empecé a hacer chapuzas y la facultad me la pagué gracias a la albañilería y el carnet del coche. Él me iba pagando el sueldo y era un tío con un sentido del humor de estos que no los ves venir que a priori te puede parecer serio pero luego tenía mucha retranca”, cuenta.

Sin embargo, ha querido contarle a su compañero una anécdota muy divertida sobre una advertencia que le quiso hacer su padre sobre las mujeres. “Mujeres hay muchas…y ahí se quedó”, relata entre risas, explicando que pensaba que iba a decirle algo más para que así Joaquín se pudiera hacer una idea del sentido del humor que tenía su padre. “Era un tío peculiar”, concluye.

La enfermedad del padre de Roberto Leal

“La vida no ha sido buena con él”, comienza diciendo sobre la enfermedad de su padre. “Se fue muy joven, se fue con 65 años”, expone. “Él empezó a tener problemas con el azúcar, él era diabético, tenía una diabetes de esas malas. Al final, como son nuestros padres, gente de trabajar y trabajar, que no querían mirarse las cosas. Él empezó con 30 años la diabetes que se la diagnosticaron pero no empezó a ponerse insulina hasta los cuarenta y tanto años”, explica.

Roberto Leal
Atresmedia

“Luego un día a los 52 años le dio un infarto y yo pensé que no pasaba de ahí. Tuve la suerte de que me cogió en mi casa. Lo que es la vida, que parece que me estaba esperando para que yo estuviera ahí”, cuenta sobre aquel día. Gracias a eso y a que lo cogieron a tiempo, pudieron llegar al hospital para que lo curasen. “Luego ya poquito a poco se fue apagando”, comenta con cierto tono de tristeza.

La pena de Roberto Leal

“Lo que más me duele es que al final él sí que ha vivido cosas mías bonitas porque él presumía mucho”, sobre los inicios del presentador en televisión que afirma que aunque a él no se lo dijera directamente, su madre le expresaba lo que alardeaba su padre por las calles de su pueblo. “Yo sé que él estaba muy orgulloso”, dice con mucha alegría en su expresión del orgullo recibido.

Sin embargo, también llegaron cosas muy bonitas en la carrera del sevillano que su padre se perdió. “El año anterior de su fallecimiento, él se acostó antes y no pudo verme dar las campanadas porque él ya no estaba bien, él ya no estaba para fiestas”, expresa. Además, el segundo año que Roberto dio la bienvenida al año su padre acababa de morir tan solo cuatro días antes y tuvo que hacer de tripas corazón.

Leal ha contado en su conversación con Sánchez la dureza de no poder estar con su padre. “Te cuesta mucho hacerte a la idea de que ya no está cuando encima vives en la distancia”, dice. En este aspecto hace referencia a que en la última etapa de su padre en vida él vivía en Madrid y su padre en Alcalá, la localidad sevillana que lo vio nacer. No obstante, ha querido que sus hijos sigan con el vínculo hacia su abuelo y les habla mucho de él.