Todo lo que rodea a los exconcursantes de OT acaba siendo, como mínimo, noticia. Esta vez, desde luego, ha sido una auténtica revolución virtual. Ricky publicaba un tweet que era malinterpretado por muchísimos usuarios y terminaba generando un aluvión de mensajes. El cantante no era elegido para formar parte de los pregoneros del próximo Orgullo LGTB de Madrid junto a sus compañeros Agoney y Marina. Rápidamente, muchos se preguntaban por el motivo de esta ausencia y comenzaban a lanzar teorías. Ahora, ha sido el propio Ricky quién ha dado un golpe sobre la mesa para parar tanta especulación…
Es uno de los momentos más esperados del año. Madrid se convierte en la capital de la visibilidad, el respeto, la diversidad y el orgullo. Millones de personas se acercan hasta la capital para participar de la manifestación y posterior fiesta con motivo del Orgullo LGTB. Este año, los encargados de dar el pistoletazo de salida para la semana grande serán los exconcursantes de OT Agoney y Marina, que acudirá junto a su novio Bast, los Javis, el waterpolista Víctor Gutiérrez, los patinadores Javier Raya y Luis Fenero, la fotógrafa Lucía Sun y la cantante Lolita Watson.
La elección de dos ex participantes de la última edición de Operación triunfo hizo que todas las miradas se posaran en Ricky. El también ex concursante no formaba parte del elenco y muchos se extrañaban. Entonces, el cantante compartía un tweet que se convertía en una revolución. “Una cosa. Sabéis que soy maricón, ¿no?”. Todos interpretaban que Ricky se posesionaba en contra de su ausencia en tan esperado acto.
Tras la polémica, ha sido el cantante quién ha querido aclarar lo que ha ocurrido. “Vi necesario poner el tweet porque, al no formar parte del pregón, que ha sido únicamente por una cuestión de edad, me sorprendió escuchar voces que decían que era lógico que no se contase conmigo debido a que era o me hacía pasar por heterosexual”, explicaba el cantante. Esta edición de 2018 se ha querido dar el protagonismo a los más jóvenes, de ahí la ausencia de Ricky.
“Somos de colores y nada relacionado con el Orgullo debería ser motivo de disputa”, terminaba. “Es el momento de la unión, de la celebración y sobre todo, de la visibilidad. Ojalá no juzgarnos, respetarnos y estar orgullosos, como mínimo, en el mes del Orgullo”. Ricky se sentía molesto por haber sido malinterpretado. “A bailar, que falta nos hace”, animaba a todos los que le han criticado.