La popularidad de los chicos de OT es el mejor de los reclamos. Son las estrellas del momento. Todo el mundo quiere estar con ellos, saber qué hacen, seguirles en las redes -hasta puntos insospechables-, ¡nunca es suficiente! Y como no, eso abre muchas puertas. Está claro que su máximo deseo es triunfar en el mundo de la música, pero tampoco hay que desaprovechar las oportunidades que salgan por el camino. En eso, Ricky ha estado rápido. El cantante ya tiene nueva ocupación laboral. Y sí, ¡mola mucho!
El éxito de OT ha pillado por sorpresa a todo el mundo. ¿Quién iba a pensar, en aquella primera gala, que pasaríamos el día viendo el canal 24 horas? Conseguir un trampolín de esta magnitud es prácticamente imposible. Ahora les toca a los concursantes aplicarse para aprovecharlo de la mejor forma posible. Y no va a ser fácil. Han pasado de ser unos chicos y chicas anónimos de veinte años a convertirse en las estrellas del momento. A ver quién es el guapo que gestiona eso.
Por el momento, hemos visto que los ya exconcursantes se desenvuelven en sus redes sociales como si hubiesen sido famosos toda la vida. Hacen bromas, se emocionan y comparten sus pensamientos con los miles de fans que les siguen día a día. Pero no ha quedado ahí la cosa. Los hay que ya tienen proyectos llamando a su puerta. Marina, por ejemplo, ha publicitado su primer concierto acústico con gran repercusión. Y Ricky... Madre mía, Ricky.
El más veterano de los exconcursantes será uno de los encargados de comentar la alfombra roja de los Premios Goya. Él mismo lo ha confirmado a ritmo de La llamada, como no. El cantante estará a pie de calle con los nominados, los invitados, el público, ¡todos! Y pretende hacerles cantar. No sabemos si lo conseguirá, pero a actitud y ánimo no le gana nadie. Una oportunidad única para destacar en otros ámbitos más allá del musical. ¿Quién se lo hubiese dicho hace tan solo unos meses?