El 26 de septiembre se acerca y Kiko Matamoros está cerrando todos los detalles para que su boda con Makoke salga como tiene en mente. Sin embargo, ha habido temas que se le han atragantado, y uno de ellos ha sido el pasotismo de su hija Laura de ejercer de madrina de boda. Este contratiempo ha enternecido a una de sus compañeras de 'Sálvame' y no ha dudado un momento en ofrecerse para llevar a cabo ese rol.
Y esa persona ha sido Carlota Corredera, la sustituta de Jorge Javier Vázquez en el magacín de tarde. La exdirectora del programa sabe lo importante que es ese día para una pareja, porque hace ya tres años que pasó por esa experiencia tan especial. Una celebración del amor que quieres vivir rodeada de las personas que más quieres. Y no tener presumiblemente cubierto el papel de la persona que te va a coger del brazo y te va a llevar al altar es un bajón. Y así estaba el otro día Kiko Matamoros, cuando confesaba que su hija no pretendía ir al enlace y, por ende, que no sería la madrina.
"Estaba en mi casa viendo el programa cuando comentaste que te había dado cosilla cuando Laura, al ser preguntada sobre lo que haría el próximo 26 de septiembre, dijo que tenía mejores cosas que hacer que ir a tu boda, y te vi tocado", relataba Carlota. "Yo no sé si tienes madrina ya, porque no tienes madre, pero yo te digo y te hago el ofrecimiento sincero y sin ningún compromiso que, si no tienes madrina y necesitas una, yo me ofrezco de corazón", le decía al colaborador, creando una situación de una enorme emotividad y con la presentadora claramente emocionada.
Carlota también sabe lo que es la ausencia de un ser querido, y en el caso de Kiko no tiene madre, que es sobre quien recaería ese papel. Kiko, en su papel de tipo duro, no miró en ningún momento a Carlota durante su proposición, pero es que, si miraba directamente a los ojos de la presentadora se hubiera venido abajo. Carlota, una vez más, con tacto y sensibilidad, consiguió que Kiko bajara sus muros, se mostrara vulnerable y abriera su corazón, hasta fundirse con ella en un sentido abrazo.
"Es un gesto que te agradeceré siempre, porque demuestra mucha sensibilidad y mucho cariño", le decía Kiko, "Creo que ya tengo madrina y, evidentemente, a mí me hubiera gustado que fuera mi madre, que hace 15 años que falleció, pero tendré un recuerdo para ella ese día. Lo tengo todos los días, pero ese día especialmente". "Me hubiera hecho muchísima ilusión que hubiera sido mi hija Laura, pero las cosas se han producido como se han producido, y estoy orgullosísimo de la madrina que voy a tener y que me va a llevar del brazo al altar", concluía la pareja de Makoke, fundiéndose de nuevo en un cariñoso abrazo con Carlota.
De momento, ya sabemos que Kiko Matamoros ya tiene quién le lleve al altar. Ahora solo queda conocer quién.