Ni veinticuatro horas han pasado desde su presentación oficial, que el príncipe Harry ha tenido que separarse ya de su hijo y de Meghan Markle. La agenda oficial de la casa real británica no hace excepciones ni ante situaciones tan especiales como la de los duques de Sussex.
Hace justo tres días la joven pareja daba la bienvenida a su hijo Archie Harrison, octavo bisnieto de la reina Isabel II. Sin embargo, no ha podido quedarse a su lado para disfrutar de sus primeros instantes en el mundo y ayudarle a adaptarse a la aventura de la vida.
El hijo de Carlos de Inglaterra tenía un compromiso oficial programado que no ha podido posponer. Este jueves hacía las maletas y ponía rumbo a Holanda, donde ha apadrinado la presentación de los Juegos Invictus de 2020. Se trata de una competición muy especial para él y para su esposa, pues fue durante su celebración en 2017 que se produjeron las primeras imágenes de ambos ya como pareja oficial.
Los Invictus casan perfectamente con valores como la superación, que tanto defienden Meghan y Harry, y en ellos compiten veteranos de guerra de las Fuerzas Armadas que sufren algún tipo de discapacidad.
Si bien no ha podido eludir su responsabilidad con la agenda de viajes oficiales de la realeza, el duque de Sussex sí que ha conseguido que un viaje trazado, en principio, para varios días, se convierta en una visita relámpago. A su llegada a las instalaciones del Sportcampus Zuiderpark, ha podido saludar a la princesa Margarita de los Países Bajos, que ha presidido el comité de bienvenida.
Meghan Markle daba a luz este pasado a su primer hijo en la madrugada del miércoles 6 de mayo. Los duques de Sussex daban la bienvenida a su primer hijo en la más estricta intimidad, y bajo un secretismo extremo que apenas han trascendido datos sobre el parto. Archie Harrison Mountbatten-Windsor pesó al nacer 3'311 kilos, pero no fue hasta pasadas las 15h de ese mismo día que el matrimonio no confirmó la feliz noticia.
La pareja pidió esperar dos días para presentar a su bebé, con el fin de disfrutar y vivir este momento tan especial de manera tranquila, y este jueves se produjo la esperada foto de familia ante los medios. Pocas horas después, la reina Isabel II y su marido, el duque de Edimburgo, escenificaron también el momento en el que conocieron a su octavo bisnieto.