Desde que se conociera la relación entre Paula Echevarría y el futbolista Miguel Torres no hemos visto más que sonrisas entre ellos. Aunque ambos intentaran mantener su relación en secreto durante un tiempo (como todo famoso que se precie) en un momento en el que la 'influencer' todavía pasaba por un difícil divorcio de David Bustamante, poco tiempo pasó hasta que se dejaron de esconder y les vimos cogidos de la mano, sonriendo como dos adolescentes y disfrutando mucho de las mieles de un nuevo amor. Sin embargo, hay algo que amenaza con romper esa burbuja de felicidad en la que viven ahora Paula y Miguel y que les separa físicamente y podría hacerlo emocionalmente.
Y es que tras un verano lleno de escapadas, toca volver al trabajo. Algo que no ha sido tan alegre para la pareja, y que el futbolista conocía que ningún equipo había querido ficharle de cara a la nueva temporada. Debido a eso, Miguel Torres no solamente ha perdido la oportunidad de comenzar el curso más cerca de Madrid (donde vive Paula), sino que tendrá que seguir jugando en el Málaga, donde, al parecer, ni le quieren ni él quiere seguir. "Él quiere buscar una salida acorde al club y a él, pero no tiene ofertas. Ningún club se ha interesado por él (…) De todos modos, Miguel tiene contrato en vigor todavía en El Málaga, así que de momento se conforma con lo que hay", ha explicado alguien muy cercano al futbolista, que no ha querido revelar su nombre, a la revista 'Look'.
Al parecer, el hecho de que Miguel se lesionara justo cuando el club se jugaba su descenso a segunda (algo que terminó pasando) y, en ese preciso momento, iniciara su relación con Paula, hizo que la afición se sintiera abandonada y apreciara el poco compromiso del futbolista con el Málaga. "Desde que empezó con Paula ha ido cuesta abajo y, de hecho, desde que comenzaron su relación él no ha sabido compaginar su relación profesional con la personal", asegura la misma fuente. Y es que tanto la directiva como los hinchas del club andaluz sintieron que Torres priorizaba más su relación que su trabajo, cosa que podría haber perjudicado a su imagen como profesional y, por ello, no habría recibido ofertas de otros clubes. "Cada dos por tres se venía a Madrid cuando todavía estaba mal él y cuando el equipo no remontaba. No se recuperó del todo y lo hizo mal", añade.
Tanto el futbolista como la pareja en conjunto se enfrentan a una etapa complicada, arrastrando el mal momento profesional de Torres y volviendo a tener que llevar su amor a distancia. Será difícil que este conjunto de tensiones no afecten a su amor, pero confiamos en que la conexión y la pasión que siempre ha habido entre ellos les ayude a unirse más y no a alejarles. Sin embargo, podrían no pasar muchos meses hasta que esa situación cambie.
Y es que el mercado de fichajes de invierno está a la vuelta de la esquina (justo cuando haga un año que la pareja comenzara su idilio), un momento en el que Miguel podría encontrar un nuevo equipo en el que retomar su carrera o caer en picado. "Aguantará hasta entonces. Esta situación para un futbolista es bajar a los infiernos. Podría ser la perdición para Miguel y se podría acabar retirando", una situación que, por otro lado, podría ser la oportunidad de Miguel para trasladarse a Madrid, ha dicho a la revista un periodista deportivo que prefiere no identificarse.