¡Menuda llorera se agarró Patricia Montero en el último programa de MasterChef Celebrity 2’! La tensión empieza a hacer mella en los concursantes y esto empieza a quebrantarlos. La rubia se topó con la prueba, sino la más difícil, sí la más desagradable…
Patricia llegaba a la prueba de eliminación como un flan. Por si el miedo a marcharse a casa no fuera suficiente, los candidatos a la expulsión se enfrentaban al reto más difícil: la subasta. Ya sabéis cómo funciona este clásico de ‘MasterChef’, los aspirantes ‘pujan’ con sus minutos por los diferentes alimentos, y a Patricia Montero, como se dice, le tocó ‘bailar con el comensal más feo’. Tal vez porque no supo aplicar su astucia en la subasta, por los nervios o por vete tú a saber a la de ‘Yo soy Bea’ tuvo que cocinar una enorme cabeza de cerdo.
Patricia miraba el rostro porcino y no podía evitar que las lágrimas acudieran a sus ojos. Seguro que pensó que los gusanos de sus compañeros al final no eran tan mala opción… No sabía qué hacer con la testa, y la audiencia la vio agobiada y sobrepasada por la situación. "Podía ver la carita del cerdito ahí corriendo", decía lamentándose. "No lo puedo ver, tengo ganas de llorar. Me da mucha pena. No lo tenía que haber cogido".
La gimnasta elaboró un plato que la salvó de la expulsión, un timbal de cochinillo. “En @MasterChef_es no solo cocinamos, también nos superamos a nosotros mismos ¡Reto Superado!”, escribía en redes, desde casa, y comentando cómo vivió la prueba. Se sobrepuso a las circunstancias, se recompuso y sacó un buen plato. Afortunadamente, salvó su pellejo y los jueces valoraron positivamente su trabajo, su esfuerzo y las ganas que pone a cada prueba.