Si algo ha quedado claro tras la emisión de 'En el nombre de Rocío' es que pese a lo que muchos han querido hacer creer Rocío Carrasco no está sola y puede presumir de contar con un enorme grupo de personas que le han hecho el camino más fácil. "Se acaba esto, pero comienzan cosas nuevas. Se acaba el tener que explicar la realidad, que ya era hora. El que quiere entender que entienda", decía la protagonista orgullosa de haber decidido dar este paso al frente que le ha cambiado la vida de manera radical.
Como no podía ser de otra manera, el programa tenía preparada una bonita sorpresa para Rocío Carrasco. Sus primas Ana y Rocío Jurado entraban en plató para mostrarle una vez más ese apoyo incondicional. Aunque siempre se han mantenido lejos de los focos, cuando Rocío se puso en contacto con ellas y les habló de la docuserie no dudaron en participar en el programa para contar la verdad y todo lo que ellas vivieron durante años. Testimonios muy importantes que echaban por tierra todo lo que se ha contado durante décadas.
Rocío Carrasco aprovechó el momento para agradecer a boca llena el trabajo y cariño incondicional que ha recibido por parte de la 'otra' Rocío Jurado: "No lo dije el día de la inauguración, pero el museo también se ha abierto gracias a Rocío Jurado, mi prima, no mi madre. Ha hecho una labor impresionante de gestiones con el ayuntamiento, de reuniones, de chuparse un montón de historias y creo que es de ley y es de justicia que ella tenga su reconocimiento también porque sin ella hubiese sido imposible”, recalcaba.
Antes de poner punto y final al programa, Rocío Carrasco tomaba la palabra. Muy emocionada, la hija de la más grande hizo un repaso a lo que han sido estos dos años: "Ha sido un camino muy duro, pero un camino muy bonito y un camino muy sanador y satisfactorio. Un camino donde todos los que están aquí y todos los que están en sus casas, la marea fucsia, no me han soltado de la mano ni un solo segundo. Y lo único que puedo hacer es dar las gracias".