Anabel Pantoja ha dejado en las mejores manos su boda, que se celebra mañana 1 de octubre. Han sido horas frenéticas para ella y sus primos Kiko Rivera e Isa Pantoja, que corrían a Cantora para arropar a su madre tras la muerte de doña Ana. Llegaban a altas horas de la madrugada a la finca familiar y, a pesar de que estuvo a punto de cancelarse, todo sigue adelante en La Graciosa para la que está llamada a ser la boda del otoño. 

Hasta allí ha volado ya Belén Esteban, que ha llegado sobre mediodía a Lanzarote. Allí se ha encontrado a los mejores anfitriones que podría soñar. Omar Sánchez se ha quedado al cargo de los últimos preparativos y ha contado con el apoyo inestimable de Irene Rosales y Merche, su suegra. Los tres se han encargado de recibir a los invitados que ya van llegando. Junto a Belén Esteban viajaban Amor Romeira y Miquel, compañero de trabajo. La cuenta atrás ha empezado...