Nuria Roca volvió a pasar un mal trago en 'El hormiguero', programa en el que esta temporada presenta la sección 'Nuria on the Rocks'. El espacio contaba con la presencia de Alberto Chicote y, en la citada sección, se hizo la pregunta: ¿Te has sentido alguna vez ridículo en televisión? "Nuria Roca y yo podemos contar lo que queramos el uno del otro porque nos conocemos desde hace 20 años", dijo Pablo Motos. "Y siempre decimos la verdad", añadió Nuria.
En un programa anterior, Pablo Motos había desvelado que Nuria Roca tenía orejas de soplillo y que tenía una foto que lo demostraba. En aquella ocasión, Nuria sacrificó una de sus 'vidas' (tienen 5 vidas cada uno para toda la temporada) con tal de que esa foto no saliera a la luz, ya que sus orejas eran la causa de uno de los traumas más grandes de su vida. Pero menudo es Pablo Motos. Esta vez sí estaba dispuesto a emitirla, con el consiguiente disgusto de Nuria, quien confesó que era verdad, que tenía orejas de soplillo y que por ese motivo siempre ha llevado el pelo largo, para ocultar sus despegados pabellones auditivos.
Y, sí, vimos la foto de la discordia. "Tengo taquicardias", reconoció Nuria, que puso cara de circunstancias al verse, de niña, con el pelo recogido y sus orejas en todo su esplendor. "¡Pero si se ve al trasluz y todo!", ironizó la presentadora.
"Yo no quería contarlo porque es un trauma. Imagina tu infancia. Yo salía de la piscina tapándome las orejas de soplillo y ahora lo sigo haciendo porque eso no se olvida... sueño que se me despegan", reveló Nuria Roca. Ese trauma llegó hasta tal punto que en cada uno de los nacimientos de sus tres hijos lo primero que preguntaba era si tenían las orejas despegadas.
Encontró la solución en la cirugía y Nuria, además del cabello largo, logró que sus orejas se le pegaran más a la cabeza gracias a este pequeño, pero importante para ella, retoque estético.