Nos colamos en el bohemio hogar de Raquel del Rosario

Así son los rincones más personales de su casa en Los Ángeles, donde vive con sus dos hijos y su pareja

Desde que se mudó a Los Ángeles hace casi un lustro, Raquel del Rosario ha creado un hogar para ella y su familia de auténtico lujo. Lujo bohemio, se entiende. La cantante ha creado un espacio cálido, lleno energía positiva y paz, adaptándose, en cierta medida al gusto que impera en su ciudad de 'acogida'.

La canaria ha diseñado para ella y los suyos una vida de ensueño, de esas que solo existen en redes sociales como Instagram o Tumblr. Una vida en la que su hijo mayor, Leo, juega con cervatillos, Mael dormía en una cuna con un peluche de Buda o se marcha con su pareja a la playa a disfrutar de los días de sol. Esto sí que es vida. En un entorno así, inspirarse para crear nuevos temas debe de ser fácil, por eso parece haber encontrado su lugar en el mundo al sur de Estados Unidos.

La Costa Oeste es su nuevo hogar y ahí parece de lo más feliz. Tan entusiasmada estaba con su nueva vida al otro lado del Atlántico, que ha mimado cada uno de los detalles de la que es su actual casa. Con toques de los indios navajo, como los atrapasueños, las mantas estampadas, o los típicos cuernos de búfalos, tan típicos de las películas del Oeste.

Algo fundamental para aportar a la casa personalidad es añadir toques de tu propia cosecha, algo que Raquel lo consigue con sus manualidades. La canaria, que es muy inquieta, ha fabricado toda una estantería para la casa empleando antiguos palés de madera. Los ha juntado, lijado, barnizado y después los ha asegurado a una de las paredes de su minimalista salón, que ahora parece mucho más cálido gracias a detallitos como estos que ella va a aportando. También ha convertido antiguas tazas, de colores llamativos en estupendos tiestos para macetas pequeñas. Así ha conseguido darle un nuevo uso a esas piezas de loza que compraba en mercadillos de segunda mano en Los Ángeles, y, además, se asegura de que nadie más tenga una maceta igual.

Raquel no solo tiene una voz preciosa, sino que también tiene un gusto muy especial.