Cada vez que nos paseamos por el Instagram de Raquel del Rosario sentimos un irremediable deseo de ser ella. O de que nos adopte. O de pedirle a Pedro, su marido, que nos acoja como si fuéramos primos lejanos. Lo que ellos prefieran, pero necesitamos vivir su vida, compartir las idílicas escenas que nos dejan en las redes sociales y ser parte de ellas. Hala, ya lo hemos dicho.
Raquel está instalada en Los Ángeles, California, y todo allí parece como sacado de una película. Las tardes cuidando el jardín, los balanceos en el columpio de la entrada, escapadas a la feria de Malibú… Nos tenemos que frotar y refrotar los ojos para saber si lo que estamos contemplando es un espejismo o es la realidad. Y resulta que es lo segundo. Qué barbaridad de vidorra. Pensábamos que ese ‘lifestyle’ solo lo habían llevado los Brady, pero no, resulta que los Castro del Rosario también lo comparten. Solo hace falta que nos digan que tienen una ama de llaves respondona y pizpireta y creeremos que viven en un show de la televisión (de los años 70).
Raquel y Pedro viven instalados en Estados Unidos, donde han formado un bonito hogar, al que le pusieron la guinda Leo y Mael, los hijos de la pareja. El primero nació en 2014 y dos años más tarde experimentaron la una ampliación familiar. Los nacimientos de los pequeños tuvieron lugar de manera natural y en casa. Fueron partos llevados a cabo en la bañera, y con cuyas experiencias acabó de lo más satisfecha la artista, que se siente muy ligada a lo natural.
Naturaleza, luz, estampas familiares perfectas… ¿Queréis daros una vuelta por el idílico día a día de Raquel del Rosario? No os perdáis las fotos de nuestra galería.