Cari Lapique (72 años) recibió el peor de los golpes posibles el pasado verano. Carlos Goyanes, su marido, fallecía a principios del mes de agosto de forma repentina a causa de un infarto tan solo un año después de haber sido intervenido para colocarle un marcapasos. Pero lo que nadie podía imaginar es que tan solo veinte días después sería su hija Caritina la que perdería la vida a los 46 años también a causa de la misma causa. Sin duda un duro varapalo del que le va a costar recuperarse.
La madre de Carla Goyanes ha intentado apoyarse en sus seres queridos y su círculo más cercano para sobrellevar estos trágicos fallecimientos pero la verdad es que cuanto más se acercan las navidades el recuerdo de su familia se hace más fuerte. Siempre han estado muy unidos y estas fechas tan alegres para todo el mundo se van a convertir en un momento agridulce: faltarán dos personas muy importantes pero deben disfrutar por los pequeños de la casa.
Cari ha perdido en muy poco tiempo a una hija y a su marido pero debe mirar al frente para dar el mejor ejemplo y disfrutar de sus nietos. Carlos, de 11 años, Santi, de 9, y Beltrán que caba de cumplir 5 son los hijos de Carla pero también están los de Caritina y Antonio Matos; Pedro y Cari, de 14 y 11 años respectivamente, quienes están viviendo la peor de las pesadillas tras el fallecimiento de la empresaria. Por suerte son una familia muy unida y para ayudarse y apoyarse decidieron vivir todos muy cerca. Son instantes muy duros que entre todos van a superar mejor.
"Mi suegra también es mi vecina", explicó Carlos a la revista '¡Hola!' para dejar claro lo importante que está siendo Cari para él y los niños en estos momentos. Y es que la abuela de la familia está muy pendiente y ayuda mucho al padre de los pequeños a la hora de conciliar el trabajo y la casa. Sin duda la relación entre suegra y yerno no podría ser mejor. "Somos una piña", reveló en el citado medio, donde explicó además que, como no podía ser de otra manera, Nochebuena y Navidad la pasarán todos juntos: "Es la primera Navidad, es especial. Hay que superarlo juntos", comentó.
Durante estos primeros días de diciembre hemos podido ver a Cari, que decidió el pasado octubre coger de nuevo las riendas de su 'showroom' de moda en el madrileño barrio de Salamanca, apoyarse en sus amigas más cercanas. De hecho, este mismo miércoles 11 de diciembre la madre de Carla ha acudido junto a Nuria González a su local para pasar la mañana y recomendarle algunos productos y prendas. Un rato distendido en el que olvidar la tragedia.
Nuria sabe muy bien lo que es perder a su marido. No hay nadie mejor que ella para estar al lado de Cari en estos momentos porque la también empresaria vivió el pasado octubre de 2023 el fallecimiento de Fernandez Tapias a los 84 años. La pareja llevaba dos décadas casada y con su sólida relación callaron muchísimas bocas que durante tanto tiempo les criticaron. De hecho, Lapique fue una de las pocas personas que acudió a la boda e incluso firmó como testigo. Desde luego su amistad viene de lejos y por eso están tan pendientes la una de la otra en estas épocas tan tristes.
Cabe recordar también que Nuria fue la primera en desplazarse hasta el tanatorio de Madrid para no dejar sola a su amiga cuando falleció Caritina pero además también uno de los pilares fundamentales cuando murió Carlos Goyanes. Estuvo en el tanto en el velatorio como en el funeral. Eso sí, el apoyo más importante para Cari es sin duda su hija hija Carla, quien en todo momento ha estado muy pendiente de ella. De hecho, en redes sociales no ha dudado ni un segundo en contar a todos lo orgullosa que está de ella elogiando su fortaleza y valentía ante las adversidades.
"Orgullosa de lo fuerte que es mi madre, que vuelve al trabajo cumpliendo sus compromisos con vitalidad", escribió en su perfil de Instagram. "Abuelona en acción", ha añadido hace muy pocas horas para animar a la gente a que se acerque al negocio de su madre para hacer "compras navideñas" de algunos de sus artículos durante una "venta privada" para su círculo cercano.