María Teresa Campos ha muerto en Madrid a los 82 años. Después de dos días ingresada en la Fundación Jiménez Díaz de Madrid debido a una insuficiencia respiratoria en los que ha estado rodeada de toda su familia, se va la periodista que más amó su profesión. Tal y como han informado desde el centro hospitalario a través de un comunicado, "lamentamos informar de que la paciente doña María Teresa Campos, que ingresó el 3 de septiembre debido a un cuadro de insuficiencia respiratoria aguada, ha fallecido a las 5.25 del día de hoy rodeada por toda su familia".
La pionera, la que rompió moldes. La que consiguió hitos antes que ninguna otra. La maestra. Se va la madre de Terelu Campos y Carmen Borrego, pero también la primera mujer que dirigió unos servicios informativos en la radio. El directo y la audiencia la nutrían. Le alimentaba el frenesí de los ‘shares’, la locura previa a estar en el aire, se sentía repleta tras finalizar un programa. María Teresa dedicó toda su vida a su profesión, al Periodismo. Su carrera le dio las mayores satisfacciones, y también algún que otro sinsabor. No entendía la vida sin el medio ni su existencia sin comunicar.
María Teresa Campos, una pionera en todo
No puede entenderse la televisión -ni la radio, ni el periodismo- sin María Teresa Campos. Locutora, presentadora, directora, no hubo nada que no hiciese. Y que no lo hiciese antes que nadie. Ella fue la que dio forma a las mañanas tal y como las conocemos. La que supo ver que había algo más detrás de todas esas personas que sintonizaban su canal durante las horas que pasaban en casa. Su prioridad fue informar y entretener y así tejó una red que continúa a día de hoy. Siempre fue y siempre será 'la reina de las mañanas'. Y eso que en su haber había mucho más. Curtida en el directo y en los informativos, puso todo su empeño en introducir una mesa sobre política en sus programas. Marcó hito y creó una escuela. Ya no se entendía la televisión igual.
En su larga trayectoria pasó por todas las cadenas. Logró cifras de récord en Televisión Española, también en Telecinco. Fue en esta cadena donde regresó triunfante tras haber dejado su etapa al frente de las mañanas. Conectó con una nueva generación y volvió a reinar. Su espontaneidad bien estudiada, sus entrevistas, el cariño con el que llevaba a los personajes, todo dejaba claro que era una grande del medio. Estuvo acompañada de sus hijos en muchos de estos proyectos. Tanto Terelu como Carmen saben el peso que supone llevar el apellido Campos. Continuar un legado así no es tarea sencilla.
La delicada salud de María Teresa Campos
Las últimas navidades fueron difíciles tanto para ella como para sus seres queridos. Terelu y Carmen se reunieron con su madre porque sabían lo importante que era para la matriarca de las Campos tener a todas sus chicas juntas. Por supuesto tampoco faltaron sus nietas. Lecturas desveló que las hijas de la presentadora estaban muy preocupadas por ella, algo que también reconoció en su blog para nuestra revista. “Últimamente, mi madre bebe y come poco. Nuestra obligación como hijas es tener un control de que todo esté bien”. Por lo tanto, la comunicadora fue internada para que le realizaran una serie de chequeos, de los que Carmen y su hermana salieron satisfechas. “La analítica estaba mucho mejor de lo que yo pensaba que podía estar”, aseguró Terelu entonces.
La salud de la presentadora se fue debilitando con el tiempo. "Mi madre padece un deterioro cognitivo importante", desvelaría Terelu Campos en mayo de 2023. "Lo que Teresa necesita ahora es mucha tranquilidad y calma", dijo Carmen Borrego en la revista Lecturas. Siempre a su lado, igual que sus nietos, Carmen y Terelu dejaban todo para acompañar a su madre. Su tranquilidad era el principal de sus objetivos. Velar por su salud, por sus atenciones y cogerle mano al llegar de trabajar. Estos instantes que ahora quedan para el recuerdo. La pérdida de María Teresa Campos ha sido un durísimo golpe para toda su familia.
Los otros problemas de salud de María Teresa Campos
El mayor susto médico que vivió María Teresa Campos tuvo lugar hace pocos años, cuando sufrió un ictus mientras estaba sola en casa. La periodista empezó a sentirse mal y su chófer, que fue casi un hijo para ella, reconoció de inmediato los síntomas y a la acercó a un hospital que contaba con una unidad especializada en estos accidentes cerebrovasculares. Tras este ictus, y con un poco de rehabilitación, mejoró notablemente. De hecho, tras eso, regresó al trabajo. Y lo hacía con la misma ilusión de quien empieza en la profesión.
Pero antes de eso, la presentadora ya había hecho frente a otro diagnóstico que le cambió su vida para siempre. Le detectaron cáncer de garganta en 2008 y, desde entonces, le aterró la enfermedad; hasta el punto, de no querer pronunciar en alto su nombre. Ella, al igual que sus hijas, era muy supersticiosa y no quería llamar a la mala suerte. Pero lo cierto es que se recuperó fantásticamente y no volvió a vivirla en sus propias carnes. Aunque sí tuvo que lidiar con que sus hijas tuvieran que pasar por ella… Algo que también le resultó enormemente doloroso.
Un año antes de que sufriera el ictus, tuvo que ser operada de vesícula y eso marcó su alimentación. Debido a que no poseía este órgano, la presentadora era de lo más comedida a la hora de escoger sus menús. Unos menús que, con el paso de los años se fueron haciendo cada vez más frugales y nimios. “Mi madre come como un pajarito”, llegarían a decir sus hijas durante su docurreality.
A pesar de todos los contratiempos con su salud, María Teresa Campos siempre se mostraba como una mujer enérgica, dispuesta para la acción informativa. Mientras que la salud se lo permitió, quiso mantenerse en activo. Sintió hasta su última aparición televisiva que siempre contó con el calor del público. Valorada por sus compañeros, querida por la audiencia y una inspiración para todos los que empezaban Periodismo. Revolucionó la manera de hacer magacines en España, y muchas veces fue pionera. Hoy se nos va una auténtica referente. Una maestra.