El motivo por el que Julia Janeiro aún no conoce a su hermano recién nacido

María José Campanario y Jesulín de Ubrique están en una nube de felicidad desde la llegada al mundo de su hijo pequeño hace apenas unas horas. Madre e hijo continúan en el hospital de Jerez donde el bebé ha llegado al mundo y hasta allí se han desplazado amigos y familiares para conocer al nuevo miembro de la familia. No obstante, en todo el día no ha aparecido por allí Julia Janeiro. Alexia Rivas ha desvelado en 'Ya son las 8' la razón de la influencer para no conocer aún al recién nacido.

"Julia Janeiro no conoce todavía a su hermano porque estaba en Madrid sacándose el carnet de conducir. Irá próximamente con su novio, Tommy, a conocerlo", ha explicado Alexia Rivas, que tiene relación con la hija de Jesulín de Ubrique y María José Campanario. "Se ha sacado el carnet y lo va a celebrar con un nuevo cochazo", ha añadido la periodista sin especificar si el vehículo se lo comprará Julia o es un regalo de sus padres.

En todo caso, ahora la prioridad de Julia Janeiro es viajar desde Madrid hasta Jerez de la Frontera para conocer a su hermano pequeño, al que, según ha contado José Antonio León en 'Sálvame', el matrimonio habría decidido llamar Hugo y no Humberto en homenaje a su abuelo como se había comentado.

Julia Janeiro comparte una imagen junto a su madre en redes sociales

Será en las próximas horas cuando Jesús Janeiro y María José Campanario salgan del hospital con su tercer hijo en común en los brazos para poner rumbo a casa y está por ver si su hermana le conocerá en el hospital o ya en la casa familiar. Desde luego, la familia de Jesulín tiene mucho que celebrar.

A pesar de la distancia que separa a madre e hija desde hace más de un año cuando Julia Janeiro decidió mudarse a Madrid, Juls está muy unida a su madre y en alguna ocasión ha querido hacerle saber públicamente lo importante que es para ella. No obstante, desde el nacimiento de su hermano pequeño no ha hecho ningún comentario en redes y estaría esperando el momento único de tenerlo, por fin, entre los brazos.