No podía contener las lágrimas. Mila Ximénez se rompía cuando Kiko Hernández le daba paso para hablar de Terelu. Muy unidas, las colaboradoras se acababan de reencontrar tras una etapa algo distanciadas. Mila estaba destrozada con la noticia. Ahora que veía a Terelu remontando no puede entender que la vida sea tan injusta. Con dolor pero también con firmeza, la mandaba toda la fuerza a su amiga y afirmaba lo que todos sabemos. Terelu saldrá de esta con más energía que nunca.
“Es un día muy complicado”. Kiko Hernández tardaba en darle paso a Mila durante los primeros minutos de Sálvame. El colaborador, muy amigo de nuestra bloguera, sabía por lo que estaba pasando. Mila ni siquiera podía levantar la cabeza y mirar a cámara. No estaba siendo una semana sencilla. La noticia de Terelu había terminado con su entereza. “Llevo una semana muy complicada”, expresaba antes de romperse.
“La vida es muy injusta a veces y pega zarpazos que no se entiende”. Mila se deshacía en lágrimas al pensar en su compañera. “Terelu ahora tenía planes para este verano...”. Rápidamente, recuperaba la entereza y pronunciaba lo que todos saben: “esto no es nada, de esto va a salir”. Era imposible sentirse cerca de la colaboradora, justo ahora que se cumplía un año del alta. “Es complicado y me han venido muchas cosas a la cabeza”.
Mila era una de las pocas que había conseguido hablar con Terelu. No obstante, la colaboradora había querido entrar por teléfono en la reunión que mantienen antes del programa para poder comunicarse con los que faltaban. “He hablado con ella”, explicaba Mila. “Tiene una capacidad de gestionar sus emociones...”. Ximénez aseguraba que quiere mucho a Terelu. “Hemos tenido nuestros momentos pero, encima de todo, está lo que nos queremos”.