La casa de ‘GH VIP 8’ está totalmente revolucionada. Las constantes peleas y enfrentamientos parecen hacer mella en los concursantes que ya empiezan a sufrir los primeros bajones debidos al famoso encierro al que se someten. En esta ocasión ha sido Marta Castro (39 años) la que ha expresado con sus compañeras su enfado con su novio, Rodri Fuertes (34 años), por no haber cumplido una promesa que hicieron antes de su forzosa separación.
Con tres semanas de concurso los participantes empiezan a echar de menos cosas del exterior y, sobre todo, a esas personas que siempre le apoyan o tan felices les hacen. Además, los típicos bajones a los que tanto suelen hacer referencia comienzan a ver la luz y son fundamentalmente el mayor de los motivos por los que los diferentes participantes suelen ponerse tristes e incluso no disfrutar de la experiencia como deberían.
Marta Castro se enfada con Rodri Fuertes
La ex de Fonsi Nieto no está pasando por sus mejores momentos. Sus broncas con Laura Bozzo (72 años) son habituales. También ha tenido lugar el desafortunado comentario sobre su lugar de nacimiento, Asturias, por el que la presentadora Marta Flich (45 años) le dedicó unas palabras en la gala del pasado jueves. Además, uno de sus mayores apoyos ha tenido que decir adiós al concurso, ya que el pasado jueves Sol Macaluso (27 años) se convertía en la segunda expulsada.
Marta estaba manteniendo una conversación con Pilar Llori (23 años), en la que esta última le dice que “lo de Rodri, no lo entiendo”. De esta manera, se podía deducir que habían tenido una charla anterior en la cual mostrada su visible descontento con su novio. “Seguramente no le dejen hacer nada, pero él sabe lo que es esto”, respondía Castro para estupefacción de todos los telespectadores que no teníamos constancia de algo que hubiera sucedido que le llevase a ese mosqueo.
Pero en la casa de ‘Gran Hermano’ también se hacen vínculos muy fuertes y es el momento en que Pilar ha tratado de apoyar a su amiga. Llori le decía que quizá su novio tenía roto el coche o que no había podido ir hasta Guadalix de la Sierra por cuestiones laborales. Lejos de ayudar a su compañera, Castro se ha enfadado aún más. “Si tiene el coche roto, que use el mío que lo tengo aparcado en la puerta de mi casa, o que coja un taxi, me da igual”, sentenciaba la asturiana.
La promesa de Marta Castro y Rodri Fuertes
Una calmado el enfado de la concursante, la conversación entre ellas ha revelado el importante detalle de la promesa a la que hacía referencia Castro. Presumiblemente, habían acordado que Rodri se acercase a las inmediaciones de la casa de Guadalix de la Sierra. Es más, la idea era que fuera con algún amigo para que se pudiera quedar en el coche y así él poder acercarse a gritarle algo para que así pudiera notar su apoyo desde el exterior.
El motivo de su enfado viene porque esto no ha sucedido aún y más aún cuando ella manifiesta que Fuertes sabe de lo que se trata, ya que él también ha participado en este programa y conoce la importancia de recibir algún apoyo. No obstante, Marta confía en que suceda pronto y pueda cumplir su promesa, ya que de lo contrario empezarían a surgirle las dudas sobre su relación, puesto que dentro de la casa tiene mucho tiempo para pensar en todo y tomar decisiones.