Los últimos años no han sido fáciles para María José Campanario, aunque la mujer de Jesulín de Ubrique siempre ha luchado contra viento y marea contra todos los obstáculos. No le importó viajar a Oporto para estudiar odontología y sacrificar horas de sueño por sacar adelante su carrera, sin embargo, la fibromialgia, la enfermedad que sufre, supuso un punto de inflexión en su vida. Ahora, con el juicio contra un periodista por grabarla cuando estaba en el centro ingresada, María José Campanario está a punto de acabar con el calvario.
Será el próximo 13 de marzo cuando se celebre el deseado juicio. "Ese día el juicio es contra un periodista que habló de una enfermedad de María José mientras estaba ingresada", aclaró González Zapatero a Jaleos. Después, como el letrado adelanta, “acabará todo para María José, al menos en esas cuestiones". Eso sí, aun tiene pendiente de sentencia el contencioso contra Kiko Hernández por contar que María José Campanario coleccionaba entrevistas de Belén Esteban en entrevistas.
El abogado también cuenta que la odontóloga desea romper su silencio, una recomendación que le hizo el propio González Zapatero, y posiblemente lo haga antes de que acabe el mes de marzo.
Estabilizada en su enfermedad, el próximo reto de Campanario será encontrar un nuevo trabajo. Sevilla, que es donde ejerce como odontóloga, está lejos de Arcos de la Frontera, su lugar de residencia, y espera encontrar otro empleo como odontóloga infantil.
Eso sí, de lo que nadie comenta nada es de la posible crisis de la que se hizo eco Raquel Bollo en ‘Sálvame’. Bollo aseguraba entonces que la intención del torero era separarse aunque no sería la realidad. Se trataría de una estrategia para generar expectativa de cara a esta vuelta. En realidad, no querría separarse de su mujer.