Quién le iba a decir a aquella 'Posh Spice' que posaba en las fotos con cara de oler a pedo que veinte años más tarde sería una de las personas más ricas de Inglaterra. Qué pasa por la cabeza de Victoria Beckham es un misterio que nunca podremos desvelar pero nadie duda ya que, bajo esa apariencia de eterno maniquí de escaparate, se esconde una hábil mujer de negocios. ¿Su mayor logro? Casarse con David Beckham, uno de los futbolistas más rentables (y guapos) del planeta.
El matrimonio Beckham fue desde el principio una alianza muy exitosa económicamente. Ahora un estudio confirma que 'los Beckham' son una marca global valorada en 500 millones de libras. Lo que significa que ganan de unos 30 a 40 millones de libras al año. Muchísimo más que la propia Reina de Inglaterra.
El es uno de los hombres-anuncio mejor pagados y ella se ha ganado el respeto de la industria de la moda con una marca que cada día se afianza y más y mejor. Desde hace años Victoria juega en la 'Champions League' de la moda con su marca homónima, favorita de famosos y 'celebrities' que presumen de buen gusto. Se les considera unos auténticos expertos en el mundo de la publicidad, y el mero hecho de susurrar su nombre ya les da réditos.
La llegada de sus 4 retoños no solo aumentó la familia, también su valor como marca. El mayor, Brooklyn, con tan solo 16 años ya cuenta con más de 4 millones de seguidores en Instagram y es una cara a reconocer en el mundo de la moda que cada vez va cogiendo más fuerza. Romeo, con 14 años, tiene un contrato con Burberry y se considera que amasa el 15% de las ganancias de la familia. El camino de los dos pequeños aún está por ponerse en marcha pero, teniendo en cuenta lo bien que se le da a esta familia rentabilizarlo todo, no tardarán en ser un valor más dentro de la casa.