María Teresa Campos, Terelu, Carmen Borrego y Bigote Arrocet acaban de poner un nuevo sello en su pasaporte. Haciéndole la competencia a Willy Fog, el clan al completo llegaba pasadas las 10 de la mañana al aeropuerto de Madrid para tomar el avión que les llevará al próximo destino de su reality: Buenos Aires. Un viaje que finalizará el próximo 8 de febrero y que dividirán entre la capital argentina y Chile, recorriendo así las raíces de la pareja de Teresa, que se convertirá en uno de los protagonistas de los futuros episodios.
Para no perder las costumbres, su llegada al aeropuerto de Madrid Barajas Adolfo Suárez ha sido casi tan espectacular como cuando fueron a Estados Unidos. Llegaron a la terminal empujando cada una su propio carro, cargados hasta arriba de maletas, y sin perder la sonrisa pues, aunque se trata de trabajo, también es una aventura.
María Teresa y Bigote eran los más felices, pues es un viaje que les hace mucha ilusión. “Lo afrontamos bien, como todas las cosas de trabajo, con energía e ilusión” ha comentado la periodista, que está más que recuperada del ictus que sufrió el pasado mes de mayo. Y mientras que ella veía el lado positivo del asunto, Bigote lamentaba el madrugón de la jornada para estar a tiempo en el aeropuerto, “madrugar tanto mata al más pintado”, bromeaba. Un esfuerzo que merecerá la pena, pues durante el viaje se reunirán con María Gabriela, una de las hijas de Bigote. “Me hace ilusión conocerla a ella y a los otros niños pequeños”, ha dicho María Teresa sobre el encuentro.
“Primero vamos a Buenos Aires, que es donde nació Edmundo, y luego a Chile, donde realmente pasó su vida”, ha desvelado Carmen Borrego sobre el itinerario. A pesar de la emoción del viaje, la productora no tuvo reparo en confesar que estaba un poco nerviosa por el vuelo. “El avión lo llevo fatal. He empezado a ‘doparme’ y en un rato me ‘doparé’ un poco más, ¡sino no me subo!”, contaba divertida. “Me encantaría que me acompañara mi marido porque voy más tranquila si viene conmigo”, ha asegurado a las cámaras y es que José Carlos tiene que quedarse en Madrid para trabajar.
Y mientras que Carmen echará de menos a su marido, Terelu hará lo propio con su hija Alejandra. “A mi hija le da pena no poder venir”, aseguraba, dejando abierta una pequeña ventana a una futura participación de Alejandra, “me imagino que no sucederá, pero no lo descarto por si luego sucede y me lo echan en cara”. A pesar de echar de menos a su hija, la colaboradora de ‘Sálvame’ no ha podido evitar confesar cuál va a ser el mejor punto de este viaje: "dejar de hablar de María Lapiedra y Gustavo".