Lara Dibildos (51 años) ha visitado el ‘Viernes Deluxe’ para relatar cómo han sido estas dos duras semanas sin la presencia de su madre, Laura Valenzuela. Ésta falleció el pasado 17 de marzo a los 92 años cuando ya llevaba varias semanas con un delicado estado de salud y, finalmente, no pudo resistir esa lucha.
La hija de la presentadora era conocedora de que la noche del viernes iba a ser dura, por todos los recuerdos que iba a desenterrar al hablar en voz alta de uno de los peores momentos de su vida como ha sido el fallecimiento de su madre. Con una actitud de fortaleza, a pesar de no poder contener las lágrimas desde el primer momento, ha contado en primera persona cómo se siente con este vacío.
Confidentes hasta el último día
Madre e hija siempre se han llevado muy bien, hasta tal punto que Lara siempre ha contado que era su mayor apoyo, la persona a la que le confesaba todos sus secretos pero también los problemas. De hecho, a Lara se le ilumina la cara al recordar cualquier pequeño detalle de su madre y le ha costado contener la emoción en muchos momentos de la entrevista con Jorge Javier Vázquez (52 años), al que incluso le ha tenido que pedir un pañuelo para secarse las lágrimas.
La actriz, muy compungida, ha revelado que “es muy duro levantarse sin ella”, a pesar de ser consciente de que su madre “ha tenido una calidad de vida estupenda”. Sin embargo, la madrileña consideraba que “era el momento” de dejarla marchar, ya que no iba a poder continuar con esa forma de vida. En su despedida, diseña una sonrisa porque cree que su madre "debió pensar: ¡qué pesada es mi hija!, porque yo no callé, le dije todo cosas bonitas".
Autocastigo
La presentadora ha relatado que justo después del confinamiento decidió trasladarse con sus hijos a vivir a casa de su madre, para estar todos juntos después de la pandemia, ya que durante el encierro pudo comprobar lo mucho que la necesitaba su madre a su lado.
Sin embargo, aunque vivieran bajo el mismo, no pasaron todo el tiempo que le hubiera gustado juntas, ya que Lara indica que en muchas ocasiones ella estaba ocupada trabajando o escribiendo y no podía pasar tiempo con ella. Tras una reprimenda del conductor del ‘Deluxe’, ha exclamado que “basta ya de castigarnos”, porque asegura que ha hecho todo lo que ha estado en su mano para el bienestar de su progenitora.
Unidas por el cáncer
La hija de Laura Valenzuela ha querido destacar que “mi madre ha sido la gran compañera de mi vida” y no se refiere solo por el hecho de que sea hija única, puesto que a pesar de tener sus diferencias por el carácter fuerte de ambas, siempre se han sentido identificadas la una con la otra.
No obstante, un mal recuerdo que compartieron fue el cáncer, ya que Laura fue el apoyo máximo cuando su hija enfermó y, casualidades de la vida, años después cuando era la madre a la que diagnosticaron un cáncer de mama, Lara estuvo apoyándola en todo momento en aquella misma clínica que años atrás se intercambiaron las tornas.
Amor por sus padres
Lara siempre se ha mostrado muy orgullosa de su madre por lo querida que es y sigue siendo pero también presenta esa admiración por su padre, José Luis Dibildos. Son su referente en lo que concierne al amor, ya que se profesaron un amor puro que le gustaría saber cuál fue el éxito, puesto que ella no ha sido tan afortunada en los temas de corazón e incluso el presentador le ha recordado aquella infidelidad televisada del padre de su hijo Álvaro Muñoz Escassi.
Para finalizar y poder esbozar una sonrisa, ha comentado que Mingote, un pintor amigo de su padre, le sugirió a éste que le regalaría un cuadro suyo que tanto le gustaba cuando se casase con Laura. José Luis, ni corto ni perezoso, lanzó al aire: “Laura, ¿te quieres casar conmigo?”. Y así es cómo se culminó esta gran historia de amor.