Las gemelas Sabina y Carmen ya han recibido su Primera Comunión, y lo que parecía un acontecimiento de paz y armonía en la familia, se ha convertido en un nuevo escándalo en la vida de Tita Cervera, ¿por qué? Pues porque las niñas recibieron el sacramento ante un limitadísimo grupo de invitados, entre los que no se encontraba su hermano Borja, ni la mujer e hijos de este.
Según cuenta Beatriz Cortázar en ABC, la Comunión debía producirse el lunes en la iglesia de San Juan de Casselles, en Andorra, pero Tita adelantó la fecha hasta el sábado. ¿El motivo? La periodista apuesta por una posible exclusiva que Carmen habría vendido a algún medio, y para que no se dinamitará adelantó la ceremonia dos días, así daba esquinazo a todos los fotógrafos que habían viajado hasta la ciudad para capturar las imágenes del momento.
Entre los pocos invitados, destacó Guillermo Cervera, sobrino de Tita, quien será la persona encargada de ser la cabeza visible del nuevo Museo Thyssen que abrirá sus puertas en los próximos meses en Andorra.
Lo más llamativo de esta celebración es que no acudieran ni Borja ni Blanca Cuesta. Ahora que las relaciones parecían de nuevo encauzadas, esta Comunión podría tambalearlas. Cortázar ha podido hablar con alguien muy cercano al hijo mayor de Tita y esto ha sido lo que le ha dicho. «Borja no está enfadado, pero sí está sorprendido de que no le dijeran nada. Además, el pasado fin de semana se encontraba en Andorra, pero no había sido invitado. Ni él ni su familia. Así que está claro que aunque le hubieran llamado en el último minuto, no habría acudido. La relación entre Borja y su madre es mucho mejor que años atrás, otra cosa es el resto de la familia. Si Tita les hubiera avisado con tiempo, habrían viajado hasta Andorra. Pero ¿cómo lo iban a hacer sin estar convidados?».
¿Será una exclusiva lo que resquebrajará por completo la familia Thyssen?