Queda nada y menos para que Anabel Pantoja abandone para siempre su vida de soltera. El próximo viernes 1 de octubre, la sobrina de Isabel Pantoja dará el 'sí, quiero' a Omar Sánchez en una idílica boda organizada en La Graciosa, uno de los paraísos terrenales de la pareja. Todo está ya listo para el gran día y los invitados ya están comenzado a aterrizar en la isla. Kiko Rivera e Irene Rosales ya han cogido un vuelo dirección Canarias para vivir uno de los momentos más especiales para el clan Pantoja después de todo lo sucedido durante el último año y tras el susto de salud de doña Ana que ha mantenido en vilo a su familia.
A través de sus redes sociales, Kiko Rivera ha inmortalizado el momento y se ha fotografiado junto a Irene Rosales y sus hijas, Ana y Carlota, a punto de poner un pie en el avión: "Go Lanzarote y de ahí a La Graciosa", ha escrito el Dj para su millón de seguidores en redes sociales, mostrando así cual va a ser su recorrido para llegar al destino final. ¡El matrimonio piensa darlo todo!
Anabel Pantoja, por su parte, ya se encuentra allí ultimando detalles y no ha tenido reparos en mostrar el apartamento en el que se han hospedado. La colaboradora de Sálvame se encuentra profundamente emocionada ante su inminente paso por el altar y ha estado arropada en todo momento por Merchi. Su madre no se ha separado de su lado ni un segundo y Anabel está a punto de reencontrarse con Kiko Rivera, Irene Rosales y las niñas. A pesar de los encontronazos que han protagonizado los primos, Kiko y Anabel son uña y carne desde que eran pequeños y el hijo de Isabel Pantoja no se iba a perder por nada del mundo este día tan especial para todos.
Raquel Bollo y Alma Cortés también se encuentran de camino a La Graciosa y, en los próximos días, Isa Pantoja, Asraf Beno y Albertito se reunirán con ellos. Por otro lado, Belén Esteban va a ser la única colaboradora de Sálvame que va a asistir a la boda... Eso sí, lo hará sin la compañía de Miguel Marcos.
Este evento familiar, que no va a dejar indiferente a nadie, va a estar marcado por dos grandes ausencias. En primer lugar, Bernardo Pantoja (padre de la novia), no va a poder asistir debido a sus problemas de movilidad, algo que Anabel quiso dejar claro para evitar polémicas. Y, en segundo lugar, Isabel Pantoja. Desde el estallido del escándalo con Kiko Rivera, la tonadillera se ha refugiado entre los muros de Cantora y únicamente ha salido para hacer frente a sus responsabilidades laborales. Así que desgraciadamente, Anabel no va a poder disfrutar de la compañía de su tía, a la que considera su segunda madre, algo que le causa una pena enorme.