Kiko Hernández sorprende en su faceta más desconocida: cantando villancicos

El colaborador de 'Sálvame' Kiko Hernández y Shaila Dúrcal, fuera de competición, pusieron el broche de oro a la gala navideña del 'Mediafest Night Fever'

Montse Jolis
Montse Jolis

Periodista especializada en corazón y sociedad

Kiko Hernández
Telecinco

"Me encantan los villancicos. Mañana me voy a poner esta gala ocho veces para verla con las niñas. ¡Más bonito todo!", dijo Kiko Hernández (46 años) con su habitual socarronería lo que motivó las risas del público. El diseñador José Perea pensó para él un traje de terciopelo y lentejuelas en color verde inspirado en el Grinch, el famoso duende gruñón que odia la Navidad. Y es que Kiko Hernández, muy metido en su papel, fue el invitado de la gala navideña del 'Mediafest Night Fever', en la que interpretó dos villancicos junto a Shaila Dúrcal, 'Mis deseos' y 'Feliz Navidad'.

Kiko Hernández es un animal televisivo, pero hasta ahora no lo habíamos visto participando en un show como el 'Mediafest Night Fever'. Kiko, por una noche, dejó a un lado su timidez y su acentuado sentido del ridículo y aceptó participar en la gala navideña como invitado especial. Lo cierto es que sorprendió a todos con su capacidad para entonar y, el más difícil todavía, el lograr empastar su voz con la de una grandísima cantante como es Shaila Dúrcal.

Kiko Hernández y Shaila Dúrcal

Kiko Hernández y Shaila Dúrcal cantaron a dúo 'Mis deseos' y 'Feliz Navidad'.

Telecinco

"Menos mal que hoy no hay valoraciones para ti", le dijo, divertido, Jorge Javier, que le agradeció haber aceptado poner el broche de oro a la gala. "No os merecíais menos", repondió Kiko, entre risas.

Kiko Hernández no lo ha pasado bien en las últimas semanas, sobre todo, por su distanciamiento con dos de sus grandes amigas, Marta López, por un lado, y la ruptura más grave, la de Belén Rodríguez, tras más de veinte años de amistad. El hecho de que Belén Rodríguez le hubiera hecho un préstamo a Kiko de 100.000 euros y que luego se los reclamara por temor a que nunca se los devolviera, fue la espoleta que dinamitó su enfrentamiento. Según el propio Kiko Hernández, la ruptura no tiene vuelta atrás. "No le miraré jamás a la cara porque quien te traiciona una vez te lo puede volver a hacer. Esta señora no me va a hacer daño nunca jamás en mi vida", dijo Kiko.