Kate Middleton está embarazada de su segundo hijo. Eso es lo que Jessica Hay, amiga desde la infancia de la esposa de Guillermo, ha contado a la revista australiana New Idea. No es la primera vez que esta amiga se va de la lengua con un tema relacionado con la Duquesa de Cambridge, puesto que fue precisamente ella quien, hace un par de años, filtró la noticia del primer embarazo de Kate.
George cumplirá un año el 22
A pocos días de que George cumpla un año, podría llegar la buena nueva de un nuevo embarazo de los duques, que habrían querido darle un hermanito al heredero con el que se llevara poco tiempo y pudieran ser compañeros de juegos.
Un hermano o hermana sería el regalo perfecto para este pequeño, que aún no sabrá muy bien lo que supone tener otra personita con la que compartir su vida, pero que seguro que el día de mañana agradece tener a su lado como apoyo incondicional, tal y como el príncipe Guillermo tiene en Harry, su hermano. Ambos han protagonizado divertidas imágenes a lo largo de los años. La más reciente, el primer selfie de Buckinham Palace, justo la semana pasada.
Según ha declarado la amiga de Kate, todavía sería pronto para que los ‘Royals’ anunciaran la feliz noticia, así que estarían dejando pasar algunas semanas para asegurarse del estado y así garantizar que tanto la madre como el futuro bebé están perfectamente.
Todo su círculo ya lo sabe
“Del círculo íntimo de Kate ya conocen todos la noticia”, ha dicho esta amiga, que habría vuelto a adelantar el embarazo de la Duquesa de Cambridge. “Lo he oído por diferentes amigos y sé que quieren hacer un comunicado oficial en unas semanas”, confirmaba.
“La cara de Kate se ve más redonda, como cuando estaba embarazada de George” decía, “también ha cambiado su peinado y esto podría ser debido a que ahora su cabello tiene más cantidad y volumen”, como suele ocurrirle a las mujeres en estado. Además, señala un gesto en el que pocos nos habíamos fijado, “cada vez que aparece en público, sostiene algo tapando su vientre”. Vamos, que Kate estaría haciendo 'un Grace Kelly' en toda regla, como cuando la princesa de Mónaco ocultaba su tripita tras un bolso de Hermés.
Este segundo embarazo podría ser algo más tranquilo que el primero, que provocó que la princesa pasara unos primeros meses algo revueltos y que hizo que el joven matrimonio tuviera que visitar el hospital en alguna ocasión debido a las nauseas de la embarazada.
También es cierto que todos los ojos están siempre puestos en Kate, por lo que no puede permitirse ganar unos gramos: kilo que coge, embarazo que le adjudican. Ya le ocurrió en su viaje en Australia, y podría estar ocurriéndole de nuevo. Conociendo los antecedentes de esta especie de ‘garganta profunda’, nosotros iríamos encargando el canastillo con todo lo necesario para el recién nacido…