Cuando el 14 de octubre la policía no pudo entregar la notificación que frenaría la emisión del programa en el que Jorge Javier entrevistó a Dulce todo quedó a imagen del público como una victoria de la niñera que, por fin, podía contar su verdad tras años de tiras y aflojas con la que fuera su jefa, Isabel Pantoja.
Lo que no había trascendido hasta este fin de semana es que la Pantoja no cejó en su empeño de castigar a quien fuera su persona de confianza y decidió tomar medidas legales contra Dulce Delapiedra y, según contaba Isabel Rábago en 'Viva la vida', denunció a la niñera mediante una demanda civil que ya ha sido admitida a trámite. Aunque la intención de la viuda de Paquirri no es la de ver a Dulce entre rejas, sí le solicita todo el dinero que ganó la noche del polígrafo, noche en la que según Isabel Pantoja se vio vulnerado su derecho al honor, a la intimidad y su propia imagen, además de revelación de secretos. Tal y como contó la periodista: “la revelación de secretos es más complicada porque se considera a Dulce como una persona de absoluta confianza que ha utilizado los años que ha estado junto a Isabel para desvelar datos íntimos que no le corresponden” y sería el resquicio por el que la justicia podría inclinarse firmemente del lado de la artista.
La noche en cuestión fue de lo más movida para su protagonista y es que las preguntas del polígrafo trataron desde un posible enamoramiento entre jefa y empleada hasta una complicada pregunta acerca de la salud de Dulce que hubiera dado a entender que Isabel no tenía toda la calidad humana que una jefa debería tener: Mila le recordó las palabras que la niñera le había confesado en la isla, cuando ambas participaron en 'Supervivientes': "Decías que habías trabajado como una mula y cargado con los baúles de Isabel Pantoja y que cuando te ibas a operar te dijo: 'Déjate de cuentos, que siempre estás mala'. Y que por culpa de no operarte nunca te has recuperado de la lesión de espalda"