Alejandra Rubio (24 años), muy feliz con su nueva etapa como madre, ha acudido al plató de 'Vamos a ver' para comentar los temas de la actualidad de nuestro país y para además despejar algunas dudas sobre ciertos titulares que se han publicado estos días en los que se decía que le había prohibido a su madre enseñar fotografías del pequeño Carlo a la gente.
La colaboradora, siempre con actitud risueña y sin problema en contestar en casi cualquier cosa que se le pregunte si no es de su estricta intimidad, ha negado en rotundo que Terelu Campos no tenga ninguna fotografía en su teléfono móvil y ha aclarado a sus compañeros de 'Vamos a ver' qué hay de verdad en eso de que no le deje enseñarlas para fardar de nieto.
"No es que se lo haya prohibido. Claro que mi madre tiene fotos de Carlo en su teléfono. Yo no le prohibo nada a mi madre, ¡solo faltaría! Pero si es verdad que le he dicho que no enseñe mucho al niño porque soy muy supersticiosa. Soy muy rara para estas cosas pero nada más", ha relatado Alejandra.
Totalmente radiante con esta nueva vida siendo madre, Alejandra Rubio no ha parado en estas últimas semanas de decir lo feliz que se siente con el pequeño Carlo: "Estoy genial. Me ha cambiado la vida de forma radical. Te lo cuentan pero hasta que lo no vives...", dijo hace unas semanas en el programa de Joaquín Prat. Eso sí, reconoció que a ella le gusta estar pendiente todo el rato del bebé, aunque es consciente de que debe delegar un poco más en el padre de la criatura.
"Soy una madre muy pesada, lo quiero hacer todo yo. Nunca he sido muy niñera pero con mi hijo, es increíble", aseguró. Reconociendo además que no le está dando el pecho y sí el biberón por "una serie de circunstancias", la joven confirmó además que es tal su obsesión por llevar el timón en estos momentos que hasta su novio le dice que está en "modo espía". Una manera de expresar que está muy pendiente de cada movimiento para ver que todo salga a la perfección.
![Carlo Costanzia y Alejandra Rubio](data:image/svg+xml,%3Csvg xmlns="http://www.w3.org/2000/svg" viewBox="0 0 1200 1987"%3E%3C/svg%3E)
Carlo Costanzia y Alejandra Rubio con su hijo Carlo.
Instagram @alerubioc
"Pero no tengo ninguna razón porque lo sabe hacer todo mucho mejor que yo. Está siendo un auténtico padrazo, volcado con el bebé", reconoció Alejandra, que tiene muy claro que haberse convertido en madre le ha cambiado totalmente la vida porque antes "no era muy niñera" y ahora "sale solo, es increíble". "Aunque lo quiero hacer todo yo, él se levanta igual y se queda a mi lado como apoyo moral. Él hace un montón de cosas pero yo soy muy pesada", relató la sobrina de Carmen Borrego.
¿Ha cambiado algo en su relación amorosa? Alejandra tiene claro que desde que está el pequeño Carlos entre ellos han tenido algún enfrentamiento, aunque sabe que es algo totalmente normal. "Ha habido discusiones porque no dormimos, pero es normal. Nos llevamos súper bien, estamos de acuerdo en todo", dijo.
Sobre a quién se parece de los dos, la colaboradora de televisión no se ha querido mojar y aseguró que tiene cosas tanto de ella como de Carlo. "Se parece a los dos, no es broma", comentó Alejandra, que además se aventuró a decir que el bebé tiene algunos gestos tanto de su suegro como de su padre.
Así se cuida Alejandra la cicatriz del parto
Poco más sabemos del día a día de Alejandra y Carlo porque ambos están siendo muy celosos de su intimidad. Prefieren mantener al niño al margen (aunque suponemos que sabremos más cosas a través del documental que van a protagonizar) y continuar con su rutina y diferentes trabajos. Eso sí, la hija de Terelu Campos sí nos ha hecho partícipes de cómo se ha cuidado la cicatriz de la cesárea.
Con el vientre totalmente plano porque Alejandra ha cuidado mucho su físico durante todo el embarazo (ha hecho mucho ejercicio y ha comido espectacularmente bien), la novia de Carlo contó a través de sus redes sociales que le daba pavor el posparto. "Os tengo que confesar que el posparto me daba bastante miedo. No solo a nivel psicológico sino también a nivel físico", relató junto a un vídeo en su Instagram.
"Por eso intenté cuidarme mucho durante el embarazado: haciendo deporte, comiendo bien... Lo que pasa que no siempre pasan las cosas como una espera. Porque lo que comenzó siendo un parto natural acabó siendo una cesárea y con una cicatriz que no sabemos cómo va a queda", comentó en las imágenes.
Por suerte y gracias al consejo de su padre, Alejandra encontró unos parches que le han venido muy bien y que le están funcionando a la perfección con la cicatriz. "Mejoro por momentos", expresó totalmente feliz con que finalmente su marca pueda desaparecer.