Los hermanos de Mila Ximénez: Concha, Manolo y Encarna, su esperanza y su fuerza en las batallas más duras

El 16 de junio, Mila Ximénez anunciaba que padecía cáncer. Desde entonces, sus hermanos no se separaban de ella, asumiendo la responsabilidad de velar por su bienestar emocional. Había sido un impacto tosco, que desestabilizaría a cualquier, pero Mila Ximénez aguantaba el tirón y se focalizaba en el tratamiento que empezaba al poco tiempo. Manolo y Conchi se convertían en su sombra durante la ausencia de su hija Alba Santana, que ha vivido en un constante puente aéreo Amsterdam-Madrid.

Mila Ximénez ha naturalizado la lucha contra el cáncer. Durante su tratamiento, sin perder la serenidad, confesaba sus inquietudes, sus miedos y todo lo que la preocupaba. La tesitura era complicada, porque nunca quiso preocupar a su familia de las noches en blanco con su mente yendo más allá. Sus hermanos se convirtieron en sus mejores confesores y en el mejor apoyo: ellos ya habían pasado por lo mismo. "Os juro que de esta salgo, os lo juro", repetía Mila a sus compañeros de 'Sálvame'. En la foto, Conchi Ximénez llegando a casa de su hermana poco antes de la noticia de su pérdida.

Conchi Ximénez llegaba acompañada de su marido, que se ha convertido también en un apoyo incondicional y valiosísimo durante el tratamiento de Mila. Tampoco se ha separado de ella en ningún momento.

Aquella frase se convertía en su mantra. Ellos se volcaban con Mila de la misma manera que ella lo había hecho en sus procesos de recuperación. Siempre discreta con la vida de Manolo, Conchi y Encarna, en 2016, exultante de felicidad, rompía esa 'regla de oro' para dar la mejor de las noticias en Lecturas: "Soy feliz porque mis dos hermanos han superado un cáncer". 

En aquella ocasión revelaba el gesto de cariño y generosidad infinitas que había tenido su hermano con ella, pues había llevado totalmente en silencio que padecía cáncer para no desestabilizarla en 'Supervivientes'. "Manolo decidió llevar en secreto el cáncer y posponer su operación para que yo fuera a ‘Supervivientes’. Cuando lo supe me volví loca contra mi cuñada y contra todos y lloré mucho. Luego lo entendí: no se puede ser más generoso que mi hermano", contaba en nuestras páginas.

Mila Ximénez nunca se rindió porque sus hermanos nunca le soltaron la mano. Todos ellos nos han dado la lección más hermosa de la vida: el amor.