Nunca han tenido la mejor relación de hermanas, pero, últimamente, las cosas entre Gloria Camila y Rocío Carrasco están más tensas que nunca. La más joven está empeñada en seguir para adelante con la casa-museo dedicada a su madre, Rocío Jurado, en Chipiona, en enero estuvo recaudando firmas para dejar patente que existe un interés popular en el proyecto que lleva paralizado algún tiempo, y que iba a dirigir su tío Amador.
El verano pasado, Gloria Camila era clara: “No se abre el museo porque a mi hermana no le da la gana”. Lo decía tajante y la señalaba a ella como la culpable de que no se esté llevando a cabo uno de los sueños de la artista, que nos dejó en 2006. Este 2016, se celebra el décimo aniversario de su muerte, y podría ser una buena fecha para que el museo abriera sus puertas, o, al menos, eso es lo que piensa Gloria, la menor de los hijos de Jurado.
Rocío, reticente a hablar de esta clase de problemas, declaraba en julio que ella también estaba deseosa de que se inaugurara el espacio. De hecho, afirmaba que si existía un problema con la corporación, estaría encantada de reunirse con ellos y dar con una solución que complaciera a todos. Entonces, ¿quién es quien no quiere que se lleve a término el museo?
Gloria, que siempre ha echado en cara que su hermana mayor se haya desentendido de ella y no mantengan ninguna relación, lanzó un dardo envenenado a Carrasco en la petición abierta en Change.com por la que recaudó firmas para llevarlas al Ayuntamiento de Chipiona para demostrar que existe un interés real por la casa museo de Rocío Jurado. En el texto, en el que señala que lo importante no es el dinero, sino honrar la memoria de su madre, dice cosas como estas: “Vivimos con personas que lo único que le mueve es el dinero, y es que aún existe gente tan egoísta, tan engreída, y tan egocéntrica. Se llevan a las mejores personas y a veces injustamente se quedan las peores”, “y por parte de la negatividad que se opone a abrirlo le mando este mensaje: haz por tu madre, lo que te gustaría que tus hijos hicieran por ti”. Tremendo pildorazo.
Cuando se llevaron las firmas al Ayuntamiento, la hija mayor de la chipionera acudía a la presentación de la colección de calzado de María Teresa Campos, quien se ha convertido en una segunda madre para ella, y con la que posa en retratos de familia. La futura mujer de Fidel Albiac no quiso hablar sobre el tema de las firmas y se escabulló sin dar explicaciones. Y no creemos que las dé, puesto que siempre que se le ha preguntado sobre esta casa-homenaje ella se ha mostrado conforme e ilusionada con la idea… ¿quién o qué frena entonces la apertura?
Después se encrudeció su guerra. En mayo, y para los micrófonos de ‘El programa de Ana Rosa’ la hermana de José Fernando tenía uno de los ataques más duros que hasta ahora le habíamos escuchado. “Tengo decepción por su actitud con unos niños que tenían 10 y 13 años y no te han hecho nada en la vida. Tú los has dejado después de haber fallecido su madre". La joven empresaria cree que su hermana se quitó de en medio cuando más la necesitaban, y jamás se ha hecho cargo de los dos hijos que su madre adoptó junto a Ortega Cano. Los pequeños eran solo unos niños cuando les faltó la figura materna, así que esa espinita Gloria la tiene clavada muy adentro. "Es un ejemplo de mala hermana, como madre ni te digo", ha sentenciado.