El 2017 empieza con de una manera agria para Gloria Camila Ortega Mohedano. La tienda que había montado en una céntrica calle de Sevilla ha acabado cerrando, a pesar de todos sus intentos por reflotarla. Pero este tropiezo empresarial puede tomárselo la joven como una manera para volver a empezar de nuevo. Para reinventarse.
La joven apostó en 2015 por estrenar su tienda bajo el sello de Santa Marta, una franquicia de moda con ropa de lo más clásica. Ropa para él y para ella, que no tuvo el éxito esperado, por lo que la joven cambió de rumbó y optó por una nueva estrategia: acercarse al público que más conoce, la gente joven. Así la tienda cambió de nombre y pasó a llamarse ‘The Time of Bocha’ y se especializó en prendas más urbanas, y algo más asequibles. En verano del 2016 le dio esta nuevo lavado de cara, pero ni con esas. Al final, el negocio, con uno y con otro nombre ha terminado fracasando, aunque ha contado con la ayuda de su padre y de su chico, Kiko, que seguro están orgullosos del carácter emprendedor de Gloria.
Los últimos días de vida de la tienda los pasaron entre suculentas rebajas, que animaban al cliente a acabar con el género antes del cierre. Una liquidación en toda regla, en la que la joven empresaria contó con el trabajo desinteresado de José Ortega Cano, que le ha echado una mano tanto para empaquetar, atender a los clientes y aconsejar, y por supuesto de Kiko, que también tiene su propio negocio, un estudio de tatuajes.
Después de este tropiezo, del que seguro habrá aprendido mucho la hermana de José Fernando, ¿qué será lo próximo que tiene planeado? ¿Más estudios relacionados con la moda? ¿Otra tienda vendiendo sus propios diseños? ¡El infinito es el límite! ¡A reinventarse toca!