¡No nos puedes hacer esto, Gloria Camila! ¡No te puedes marchar de ‘Supervivientes'! La hija de José Ortega Cano pasa sus horas más bajas en el reality de aventura, separada de su novio, Kiko, que actualmente está en otro equipo. Tan agobiada se ha visto, que ha llegado a pronunciar la frase más temida de todas: “me quiero ir”. Y nosotros, como James Stewart en ‘Vértigo’, cayendo en una espiral de terror al pensar que no tendremos a una de las musas de la edición en la isla.
Gloria Camila se pasea por la playa cabizbaja y solloza de pena. Ha hecho lo peor que se puede hacer en un reality semejante: pensar en los que la esperan fuera. La joven cree que hace falta en su familia y ha temido por su hermano, que desde hace unos días está ingresado en la clínica López Ibor, y su padre, “me necesitan”, ha dicho. A ella no se la ha informado de este último ingreso de su hermano, ni de sus últimos altercados, lo único que sabe es que ha sido tía; aún así, ella se huele lo peor.
Kiko, por supuesto, también la echa de menos, “no sé cómo estará”, y está deseando contarle “cómo está el panorama”. ‘El panorama’ al que se refiere Jiménez es que está peleado con todos, pero, especialmente, con Alba a quien ha tachado de “mujer florero” y haber conseguido su fama por ser pareja de nombres famosos, ¿no le suena de algo esto último? Pero Kiko no hace examen de conciencia y solo piensa en “desahogarse” con su chica, “que me entienda, que me apoye”. Yo, yo, yo, yo…
Gloria, por su parte, se siente querida en su grupo, donde Laura Matamoros se ha convertido en uno de los salvavidas en los que mantenerse a flote en estos días en los que pareciera hundirse su paso por ‘Supervivientes’.