Noemí Salazar vivió durante este jueves 12 de diciembre una noche llena de emociones. La concursante se convirtió en la última expulsada de ‘Gran Hermano VIP 7’ y se quedó a las puertas de la gran final, que tendrá lugar el próximo 19 de diciembre.

Antes de cruzar las puertas de Guadalix de la Sierra para dejar el programa, la ya exconcursante vivió un momento más que esperado: el reencuentro con su madre. A pesar de la depresión que está sufriendo, Raquel Salazar decidió visitar a su hija en la casa y explicarle de primera mano por qué no la ha estado defendiendo en plató.