El polígrafo que María Lapiedra concedió a la revista LECTURAS ha generado un aluvión de titulares, y uno de los más llamativos no tiene que ver con su historia de amor/desamor con Gustavo González, sino con la traición que este cometió con una de sus supuestas mejores amigas, Gema López.
Conchita descubrió a través de sus preguntas que Gustavo había sido quien filtró la información de la separación de Gema, que nunca ha querido hablar de su vida privada, y que también fue él quien dijo que su amiga estaba saliendo con otro compañero de cadena. "María cuenta que la relación de Gema López comenzó antes de que su separación fuera conocida, el año pasado, y en ningún momento ha comentado que sea una relación acabada", nos matizó la experta en mentiras y verdades.
Ahora Gema ha querido tomar la palabra y dirigirse, en vez de a su amigo que la ha traicionado y vendido, al ‘mensajero’, María. “Esta historia soy consciente de que se está moviendo hace mucho tiempo. En su día María Lapiedra ya quiso utilizar esto en un Deluxe, me enteré en una publicidad, es más, está ahí. Cuando volví de publicidad le dije a María: ‘Larga, di lo que tengas que decir, aquí estoy porque no me gusta que me chantajeen o amedrenten’. Durante este tiempo no lo ha utilizado y ahora debe ser la bala que le quedaba en el revólver. Esta bala no me hace daño, no me hiere. No voy a bailar al son de María Lapiedra.”
Mientras que ‘mató al mensajero’, para su ¿examigo? no tuvo palabras. Suerte que ahí estaba Mila Ximénez y sí que le quiso cantar las cuarenta al fotógrafo. “Gustavo miente porque sabía perfectamente que esta historia se estaba moviendo. Entre amigos, amigos tan buenos y tan íntimos, tenías que haber ido a tu amiga y haberle dicho que habías metido la pata. Si eres un bocazas, hay que pedir perdón y si es inventado hay que arrodillarse delante de tu amiga. Los amigos lo demuestran”.