Frank Cuesta, sobre su cáncer: “Aunque veáis que bajo de peso o que se me cae el pelo, es normal. No es que me esté muriendo”

Recientemente el propio Frank Cuesta (52 años) nos informaba a través de su canal de YouTube que debía comenzar de nuevo su tratamiento para intentar acabar con el cáncer que padece desde hace casi veinte años y con el que convive desde entonces: "Llegó un día especial para mí. Llegó el día en el cual yo comienzo un tratamiento”, explicaba en uno de sus últimos vídeos mientras le veíamos paseando por el santuario de animales que tiene en Bangkok, en Tailandia, y por el que tanto ha luchado contra su exmujer, Yuyee (51 años), que quiso arrebatarle este terreno sin éxito hace pocos meses. Ahora, el herpetólogo ha vuelto a compartir un nuevo vídeo en su canal donde podemos comprobar los efectos de este tratamiento en su sorprendente cambio físico.

Frank Cuesta reaparece tras haber empezado su tratamiento contra el cáncer

Frank ya avisó que había cogido peso porque con este tratamiento iba a “bajar de peso”, advirtiendo que “aunque veáis que bajo de peso o que se me cae el pelo, es una cosa normal y no es que me esté muriendo ni que me esté pasando nada malo, es para mantenerse. A veces, hay que pasarlas putas durante un tiempo para estar mejor”. Y así ha sido, tal y como él mismo adelantaba, en este vídeo podemos verle de nuevo en su santuario y, mientras nos presenta a algunos de los nuevos animales que han llegado al centro, podemos ver como se le ha caído todo el pelo del cuerpo, incluyendo el de las cejas.

"Ahora mismo este pato tiene más pelo que yo. Vaya tela", comenta el leonés mientras mustra a cámara un patito e intentando sacar el lado positivo de todo, demostrando un gran talante y sentido de humor incluso en estos momentos tan delicados. Este vídeo, llamado ‘Llegan nuevos bichetes’, Frank habla de este cambio físico, algo inevitable con este tipo de tratamiento, hecho que no le ha impedido dejar de trabajar en el santuario, un refugio para los animales y para él mismo, siendo su mayor motivación y su gran lucha en la vida.

El accidente con ranas venenosas de Frank Cuesta

Si no tenía suficiente con el enfrentamiento con su expareja y con esta enfermedad, recientemente Frank sufría otro grave incidente al envenenarse con unas ranas mientras trabajaba en su santuario. Esto lo relataba en otro vídeo titulado ‘El domingo casi muero en el hospital’ donde comentaba con todo lujo de detalles como una rana le expuso a un envenenamiento masivo que le afectó los riñones, el hígado y el bazo, llevándolo al hospital de urgencia. Esto fue un gran susto que se mezcló con el tratamiento que está llevando a cabo, pero parece que todo quedó en nada y este ha podido recuperarse bien y ahora continua luchando con el cáncer que padece.

 

 

 

 

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Esta no es la primera vez que Frank sufre un incidente así. En agosto del año 2023 también fue mordido por una serpiente, exactamente una víbora, algo que él mismo compartió en sus redes. “En el hospital con la peor mordedura de víbora posible” escribía junto a la imagen de una de sus manos en la que podíamos ver la herida que le había provocado este animal.

A pesar de esto, el que fuese presentador de ‘Frank de la jungla’ no puede estar más contento con su ‘Santuario Libertad’, donde lleva años ayudando a estos animales para intentar que vivan en su hábitat natural y a los que rescata del negocio ilegal. En estos ha encontrado la mejor compañía posible, algo que dijo cuando visitó hace tiempo ‘El Hormiguero’: “Vivo en un contenedor de un camión, así evito que vengan visitas, ya sean mujeres o amigos, porque no me gusta tenerlos, siempre me traicionan. La gente me aburre mucho, por eso tengo pocos amigos y hablo con mi nutria, que se llama Chispas, me entiende, le digo cualquier cosa y sabe lo que quiero decirle. Todos los animales se humanizan", expresaba.

Sus hijos, su otro gran amor

Además de estos animales, a los que ha devuelto la vida con una segunda oportunidad de vivir dignamente y siendo bien atendidos, Frank también está muy pendiente siempre de sus cuatro hijos, Zape, Zorro, Zen y Pepsi, fruto de su matrimonio con la tailandesa. La pareja también eran padres de Zipi, mellizo de Zape que falleció apenas unos días después de nacer. A pesar del gran apoyo que Frank dedicó a su ex cuando esta estuvo condenada a 15 años de cárcel por supuesto tráfico de drogas, ella no tuvo reparos en querer arrebatarle este lugar, pidiéndole una enorme cantidad de dinero a cambio de cedérselo. En esta batalla los hijos de ambos se posicionaron a favor a de su padre.