Dicen que Hacienda somos todos, pero hay famosos que hacen como si las obligaciones tributarias no fueran con ellos. Algunos se salen de rositas pero otros se tienen que enfrentar a la justicia, al escarnio público y a pagar lo defraudado a veces con intereses altísimos.
El último en estar en la cuerda floja tributaria es Borja Thyssen, el 'hijísimo' ha saltado a las páginas de los periódicos porque Hacienda pide tres años de cárcel para él por defraudar 630.000 euros. Borja está acusado de 'simular' residir en Andorra.
En enero, Bar Refaeli, la super-ultra-mega TOP MODEL declaró por segunda vez ante las autoridades fiscales israelíes acusada, junto a su madre, de un presunto delito de evasión fiscal. Según la acusación, Refaeli habría recibido regalos que no declaró (y estaba obligada) y se podría haber beneficiado de descuentos en bienes de lujo cuanto menos sospechosos.
A veces los famosos no defraudan al fisco, sino a alguna entidad bancaria. Hace unos días nos enterábamos de que Tori Spelling, la memorable 'Donna' de 'Sensación de vivir', debe a American Express 40 mil dólares. La compañía le reclama esta cantidad más los intereses. Spelling se lamenta de haber crecido "como una niña rica", tener problemas de liquidez y no poder habituarse a un estilo de vida más sencillo. ¿Debería darnos pena?
Pero donde más fraudes tributarios se concentran allende los mares es en Hollywood, ya que los actores están demasiado preocupados por sus carreras cinematográficas como para acordarse de sus obligaciones con la IRS. Uno de los que más problemas tuvo en su día fue Nicolas Cage, que en 2009 descubrió que debía 13 millones de dólares. Peor aún, también descubrió que a base de comprar cráneos de dinosaurios, pitones albinas y casas encantadas, se había ventilado los 150 millones de la fortuna que había amasado a base de blockbusters y éxitos en taquilla.
Pero no solo se defrauda fuera, pero desgracia en nuestro país también hay caras conocidas enzarzadas en problemas con la Agencia Tributaria. A finales de año Hacienda hacía pública su lista anual de morosos y, entre un sinfín de nombres de compañías, se identificaban algunos titulares conocidos. Como Mario Conde, que ostenta el dudoso título de ser uno de los diez mayores morosos del país. Según este informe, el ex director de Banesto le debe al fisco español nada menos que diez millones de euros. Casi na-da
Otro que figura en la infausta lista negra de Hacienda del año pasado es el motociclista Dani Pedrosa, que parece que no tiene tanta prisa en poner sus impuestos en regla como en ganar carreras y premios. Según esta lista, Pedrosa le debe a Hacienda casi siete millones de euros.
Otros conocidos de la lista son los diseñadores sevillanos Victorio&Luchino: su empresa, V&L Costura Diseño Moda, debe a la Agencia Tributaria 2,6 millones de euros. Quién sabe, a lo mejor tienen la suerte que tuvieron en su día Dolce&Gabbana y son absueltos. Los diseñadores italianos habían sido acusados de evasión de impuestos y la fiscalía italiana pedía hasta un año y medio de prisión por evadir 200 millones de euros.
Y luego hay casos que están en el imaginario de todos: ¿quién no se acuerda de Lola Flores pidiendo una peseta a cada español para saldar sus deudas con Hacienda? Eran otros tiempos y los artistas debían dedicarse a su arte, no a llevar complicadas cuentas. ¿Y Al Capone? Fue el primer defraudador famoso y el que demostró que con Hacienda no se juega.
Repasamos en esta galería de imágenes algunos de los conflictos tributarios más polémicos y peliagudos.